El plante de los anestesistas del Servet se mantendrá otra semana

Las operaciones vespertinas en el hospital Miguel Servet seguirán a bajo ritmo durante lo queda de semana debido al conflicto laboral que enfrenta a un grupo de especialistas médicos debido a las discrepancias con su situación retributiva. La semana pasada fue necesario suspender más de cien intervenciones, un problema que no se ha repetido en esta ocasión puesto que ya se dejaron de programar la mayoría de ellas con la intención de evitar molestias a los pacientes.

Fuentes del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón explicaron ayer que a pesar del freno en las operaciones se destinarán las camas que queden libres para afrontar el incremento de actividad de los de epidemiología debido a la fuerte incidencia de gripe de las últimas semanas, pues se han duplicado los casos registrados de la enfermedad.

Las intervenciones sanitarias durante las tardes se programan al margen de las jornadas laborales de los especialistas para reducir las listas de espera. Desde la DGA se pretendió variar el sistema de retribución por estos trabajos extra, algo que provocó el malestar del colectivo, de forma que un «núcleo duro» de una decena de anestesistas decidió renunciar a estas operaciones para lograr una mejora salarial.

Las negociaciones internas entre la dirección del centro hospitalario y los especialistas se han sucedido durante este periodo, pero el acuerdo está lejano, debido a la dificultad de conciliar sus reivindicaciones particulares con la masa salarial del resto de trabajadores públicos.

Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos en Aragón (CESM) consideran que esta situación es solo una parte del «hartazgo» generalizado que existe en la profesión. «Ningún Gobierno de Aragón se ha preocupado por garantizar las condiciones de este colectivo», explica su presidenta, Merche Ortín.

NEGOCIACIÓN

Por el momento desde la representación sindical anuncian paros de diez minutos para los días 7 y 21 de febrero que se repetirán en marzo. CSEM ve necesaria una movilización global para solucionar buena parte de los aspectos salariales que arrastran desde hace varias legislaturas. Si la negociación que quieren entablar con el Gobierno de Aragón no tiene éxito están dispuestos a convocar una huelga durante el mes de abril.

Respecto a la situación de los anestesistas creen que el problema está «enquistado» y no prevén una solución «a corto plazo», por lo que las operaciones por las tardes seguirán el mínimo.