La Cincomarzada, dedicada a 40 años de «reivindicación y fiesta»

La Cincomarzada 2019 calienta motores para celebrar una edición de este año que se ha decidido dedicarla a su 40 aniversario. Bajo el lema 1979-2019: Cincomarzada, reivindicación y fiesta, ayer se celebraba la primera reunión preparatoria en la sede de la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ) con las entidades vecinales interesadas en participar y estar presentes en una cita que volverá, un año más, al parque Tío Jorge si la lluvia, el viento y el nivel del freático lo permiten. Con el precedente del año pasado, que se tuvo que posponer a mayo y finalmente cancelarla por las precipitaciones registradas, se ha pensado en instalar una macrocarpa para tener un plan b en caso de que llueva.

Esta es solo una de las novedades que se preparan para la edición de este año, una vez que se ha despejado la principal duda que sobrevolaba sobre la principal fiesta laica en Zaragoza y la más multitudinaria después de las del Pilar. La incógnita radicaba en la ejecución de las obras de construcción del tanque de tormentas que el consistorio tenía previsto realizar en el parque Tío Jorge, que finalmente se ha decidido licitar más tarde y los trabajos no comenzarán hasta los últimos meses del año.

Con ello, el ayuntamiento daba vía libre a una nueva edición en la principal zona verde del Arrabal zaragozano que, a la vista de la afluencia de entidades ayer a la sede de la FABZ puede registrar esta vez un nuevo récord de participación para esta cita tan especial. No solo la fiesta cumple 40 años, también la propia federación, que es la que lo organiza desde que en 1979 decidiera poner fin al paréntesis que supuso el franquismo para esta jornada reivindicativa y festiva. Ya suelen apuntarse en torno a un centenar de entidades cada año y recibir a más de 100.000 personas en su celebración.

Ayer mismo se abría el plazo para los colectivos que deseen montar puesto en la Cincomarzada puedan inscribirse. Hasta el próximo día 15 tendrán de plazo, con la antelación suficiente para que se complete toda la tramitación administrativa para recibir los permisos. Unos pasos a cumplir que el año pasado ya suscitó críticas en las entidades (por el gasto y la complejidad para ellas) y que, a juicio de la FABZ, desincentiva la participación.