La localidad de Ansó celebró ayer el Día del Traje Tradicional Ansotano, que se convirtió en un poderoso foco de atracción que llenó la villa de visitantes cuando agosto enfila su última semana. Desde 1968, los ansotanos dedican una jornada a realizar diferentes actividades en honor a su vestimenta típica, uno de los trajes más antiguos de Europa.

La jornada se convirtió un año más en una auténtica recreación de las costumbres y de las tareas cotidianas de antaño, a cada una de las cuales corresponde un traje distinto.

«Es un día espectacular que transporta a otra época», subrayó la concejala de turismo de Ansó, María del Carmen Sánchez. «Esta jornada es una exaltación en la que queremos mostrar a todo el mundo que contamos con un traje extraordinario por su antigüedad, su belleza y su variedad», explicó. «Es un hecho insólito que llegue a nuestros días y que hasta los años 80 tres hombres y una mujer todavía lo vestían diariamente», añadió.

Este año se ha alcanzado la 49 edición. Las actividades comenzaron a las 9.00 horas con una cucharada de migas para dar la bienvenida en la Fuente Alta, en la entrada de Ansó. Una hora más tarde, se realizó una escenificación de costumbres típicas ansotanas en el centro de la localidad.

RECREACIÓN

La presidenta de la comarca de la Jacetania y alcaldesa de Ansó, Montse Castán, destacó la importancia del día del traje para los ansotanos, «que desde hace muchos años supieron ver lo que ahora se está haciendo turísticamente en otros puntos de la comunidad». «Ahora está de moda hacer recreaciones históricas o eventos que sirven de reclamo turístico». dijo, algo que «los ansotanos supieron ver en los años 70».