La conocida abogada penalista zaragozana Cristina Ruiz-Galbe falleció ayer en Zaragoza tras sufrir una grave enfermedad. Su muerte ha causado una gran consternación entre los profesionales del derecho de la capital aragonesa, dado el prestigio de la letrada, hija del también penalista José Antonio Ruiz-Galbe, quien murió en el año 2010.

Cristina se colegió en el año 1980 y desde entonces cultivó las múltiples facetas del derecho penal, tanto delitos contra las personas, como su progenitor, como la delincuencia económica. En este sentido, desarrolló un destacado papel como defensora del concejal zaragozano Antonio Becerril en la operación Molinos, que dio lugar al más famoso caso de corrupción urbanística de la comunidad en torno a la figura de la exalcaldesa de La Muela, Mariví Pinilla. Tanto su hermano como su marido e hijo ejercen asimismo la abogacía.