El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvo por la noche a un vecino de Zaragoza después de que asesinara a su hija de 4 años de un corte en el cuello.

El infanticidio tuvo lugar pasadas las 23.00 horas en una vivienda del número 76 de la calle Domingo Ram, en el zaragozano barrio de Delicias. Una llamada de alerta a la sala del 091 en la que una vecina informaba de que oía gritos de una mujer en la que decían "ha matado a mi hija, ha matado a mi hija" puso en marcha un operativo policial que halló a la menor desangrándose, a la madre en shock y al sospechoso en paradero desconocido.

Dos asuntos eran de vital importancia en esos momentos: salvar a la menor, que fue trasladada de urgencia al hospital Materno Infantil y que anteriormente fue atendida por los agentes de paisano de la Policía que fueron los primeros en trasladarse al lugar, y detener al presunto autor de la agresión.

Casi de forma paralela, agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana que participaba en el dispositivo daba con el sospechoso en la calle Infantes de Aragón (en el barrio Casablanca) al que detenían y recibían la trágica noticia de que la menor había fallecido como consecuencia de la lesión grave en esta zona vital. Inmediatamente le imputaron el delito de asesinato a este hombre, identificado como N. C. O., de 34 años, de origen nigeriano y padre de la menor.

Al domicilio se trasladaron también agentes de la Brigada Provincial de la Policía Científica para recabar todas las pruebas pertinentes para esclarecer este crimen cuyas circunstancias estaban siendo investigadas al cierre de esta edición.

En esta misma calle, en el 2016, un hombre mató a su compañero de piso tras una discusión por la televisión. Le asestó ocho puñaladas y se marchó de la casa. Fue condenado a 20 años.

El presunto autor de este infanticidio se encuentra en los calabozos de la comisaría Actur del Cuerpo Nacional de Policía a la espera de que preste declaración. La madre fue conducida ayer a dependencias policiales para tomarle declaración, donde recibió la trágica noticia de la muerte de su hija.

Esta familia de origen nigeriano llevaba 5 años viviendo en esta calle del popular barrio zaragozano. En la casa vivía la pareja, la niña de 4 años y otro menor de 2, así como un adulto. No habían protagonizado nunca ningún episodio violento, según los vecinos.

Un testigo de los hechos desde el balcón en el que vio todo. Foto: Nuria Soler

"Me asomé a la ventana y estaba ella, con una braguica solo pidiendo ayuda"

José Ignacio Gracia tiene en su mente la cara de la niña asesinada cuando todas las tardes del confinamiento salían al balcón a aplaudir a los sanitarios. "Todavía no me lo creo, fue muy desagradable, me asomé a la calle y la vi con una braguica pidiendo ayuda", recuerda.

"Pedía ayuda desesperada, gritando y llorando hasta que de repente se quedó en estado de shock en medio de la calle", señala este vecino que destaca que rápidamente otros vecinos bajaron a la calle a cubrirla con toallas y mantas.