La Fraternidad Internacional del Camino de Santiago (FICS) espera abrir este verano el nuevo albergue para peregrinos, que estará ubicado en la antigua casa del cura de Canfranc Pueblo, frente a la iglesia, y que está rehabilitando el ayuntamiento.

El presidente de la entidad, Juan Carlos Pérez Cabezas, informó de que el nuevo albergue contará con 16 plazas, aunque la FICS aplicará el protocolo contra el covid aprobado por la Asociación de Municipios del Camino de Santiago, por lo que inicialmente habrá disponibles algunas menos.

Las instalaciones se abrirán con dos hospitalarios voluntarios españoles o de otros países que trabajarán en turnos de 15 días y ofrecerán, a cambio de un donativo no obligatorio, los servicios básicos, como pernocta de un solo día –en general– y una cocina a disposición de los peregrinos, y también les informarán sobre el Camino. El albergue estará abierto durante las épocas de mayor afluencia de caminantes, aunque más a largo plazo podría acogerlos a lo largo de todo el año.

«Estamos pendientes de que se entreguen las obras», explicó Pérez Cabezas, quien recalcó que la Fraternidad ofrecerá a los peregrinos «la acogida tradicional jacobea, una de las esencias del Camino de Santiago». También sellarán las credenciales con las que los caminantes podrán acreditar en Santiago de Compostela que han realizado el Camino.

El presidente recalcó que podrán utilizar el albergue peregrinos con poco poder adquisitivo, haciendo notar que «desde Canfranc quedan más de 800 kilómetros y en hoteles el gasto es muy importante». Los jóvenes quieren caminar «20 o 30 días» y hay peregrinos que proceden de países donde «los sueldos no son muy altos». 

Pérez Cabezas puntualizó que este albergue no estará «nunca en confrontación con la iniciativa privada» y que este tipo de instalaciones era el predominante cuando comenzó el auge de la peregrinación, a finales de los años 80 del siglo XX.

Asimismo, indicó que para llegar a Canfranc es necesario subir y bajar el paso de Somport, siendo más suave la siguiente etapa, hasta la ciudad de Jaca por Villanúa y Castiello de Jaca, lo que permite «disfrutar del paisaje» pirenaico en un recorrido que está «relativamente bien, aunque hay que ir mejorándolo», sobre todo la señalización. Ha recordado que el tramo aragonés forma parte del Camino Francés y se une al que parte de Roncesvalles en Puente La Reina (Navarra).

El presidente de la Fraternidad ha observado que la estación ferroviaria de Canfranc está 4 kilómetros antes de llegar a este albergue, en Canfranc Estación, y «va a ser un foco importantísimo» de atracción de peregrinos. En la estación habrá un centro de información para los caminantes.