La agrupación de electores de Teruel Existe llevó este martes al Senado al profesor asociado de Geografía en la Universidad Rovira i Virgili, Sergi Saladiè, para comparecer ante la Comisión de Transición Ecológica e informar sobre el reto de una transición energética «sostenible». El experto explicó su tesis doctoral, según la cual, la instalación de parques eólicos puede causar despoblación, mientras que la generación distribuida sí que ofrece beneficios.

El experto se sirvió del ejemplo de Cataluña para radiografiar cómo ha sido en los últimos años la implantación de las energías renovables, y qué conclusiones se extraen.

Un tema que Saladiè analizó en su tesis doctoral, que se centró en tratar de averiguar por qué ciertos colectivos sociales se oponen al modelo de implantación actual de energías renovables, aun cuando los mensajes que llegan desde las Administraciones públicas y los promotores es que las centrales eólicas pueden repercutir en nuevos puestos de trabajo e ingresos en las arcas municipales que ayuden a superar las dificultades estructurales que tienen y «con la minusvaloración del impacto paisajístico».

El experto comparó ejemplos concretos, como el de la planta de Wildpoldsried (Alemania), que con generación distribuida (11 aerogeneradores y desarrollo integral de renovables) obtiene la energía local más 4,5 millones anuales, frente al ingreso de 250.000 euros de la instalación de Batea (Tarragona) con 42 molinos.

Otra de las conclusiones que destacó fue que los países que tuvieron más éxito en la implantación de megavatios de renovables fueron los que aplicaron políticas que favorecían la generación distribuida y la participación de las comunidades locales.

Por todo ello, el senador de Teruel Existe, Joaquín Egea, defendió que la ponencia del Senado sobre transición energética debería acordar «que el empoderamiento rural debe ser también un empoderamiento energético, que la transición hay que ver quién la hace para quién y cómo».