Las aguas del PAR continúan revueltas incluso después de que la comisión ejecutiva del pasado 21 de junio determinara la fecha del próximo congreso, previsto para los días 23 y 24 de octubre, después de las sonoras críticas de distintos militantes y expresidentes del partido que claman por la renovación del partido.

El anuncio este jueves de la portavoz del PAR en la Diputación Provincial de Teruel (DPT), Berta Zapater, de una «declaración de intenciones conjunta» con el portavoz de Ciudadanos, Ramón Fuertes, que se encuentra en la oposición en la institución provincial mientras PAR y PSOE gobiernan juntos, encendió las alarmas en el partido.

La dirección regionalista entendió el movimiento de Zapater como una nueva afrenta del sector crítico. Horas después del anuncio, el presidente del partido, Arturo Aliaga, convocó una comisión permanente telemática que acordó «desautorizar» a la diputada, trasladar el caso a la comisión de disciplina del partido y abrir la posibilidad de que sea suspendida de militancia.

A través de un audio remitido a los medios, Aliaga destacó los acuerdos adoptados en la permanente. «En primer lugar, desautorizar a la diputada. Los acuerdos con otros partidos políticos son competencia de la ejecutiva, y en ningún caso, puede ella comprometerse a negociar acuerdos con otros partidos políticos», manifestó.

«En segundo lugar, se decide trasladar a la comisión de disciplina del partido estos hechos por si pudieran ser objeto de expediente disciplinario», prosiguió. En tercer lugar, se apercibe a Zapater de modo que, «de reiterarse estos comportamientos, al margen de las decisiones que tomen los órganos del partido, se le aplicaría lo previsto en el artículo 21», es decir, se le suspendería de militancia. El último acuerdo adoptado por el núcleo duro del partido fue trasladar dicho documento a la comisión ejecutiva del partido.

Zapater defiende su autonomía 

A última hora de la tarde, Berta Zapater aseguró no tener constancia de la decisión adoptada por la permanente, por lo que declinó valorar su situación. La que sigue siendo por ahora portavoz del PAR en la DPT subrayó que «el coordinador del grupo y miembros de la dirección», sin especificar quiénes, eran «conocedores» del anuncio con Ciudadanos. Una máxima que, según pudo confirmar EL PERIÓDICO, rechazó el secretario general, Joaquín Serrano, que afirmó en la permanente que solo tuvo conocimiento del anuncio minutos antes y que «en ningún caso» autorizó la rueda de prensa, sino que desautorizó que se hablara en nombre del partido.

 Zapater rechazó definir como «pacto» el anuncio con Cs, y lo calificó como una mera «declaración de intenciones». Aseguró que la rueda de prensa protagonizada con Fuertes «nada tiene que ver» con las discrepancias con la dirección del partido, y que «se circunscribe al ámbito de la DPT». Señaló que «lo importante» es que ya se ha convocado el congreso, y explicó que formará parte «de un proyecto que busca renovar el PAR», pero en ningún momento se plantea abandonar el partido.

Además, lamentó la decisión de la permanente. «Ningún militante del PAR entendería un expediente por plantear espacios de acuerdo. Debe respetarse la autonomía y la independencia de cada espacio», insistió. Fuentes cercanas a la dirección consideraron, por el contrario, que el movimiento de Zapater se circunscribe entre los «intereses ocultos» de exaltos cargos del PAR que solo buscan «desestabilizar» al partido.