Un total de 124 universitarios aragoneses tendrán acceso a una beca Erasmus+ este curso 2021-2022 para estudiar en alguna universidad europea. El Boletín Oficial de Aragón publicó este martes la resolución de estas ayudas impulsadas por el Departamento de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento del Gobierno de Aragón que, por primera vez, podían llegar a cubrir todo el curso académico e incluir cuantías mensuales diferenciadas en función del coste de vida del país de destino, estableciendo tres franjas distintas.
Tras el cambio introducido en las bases reguladoras por el Departamento que lidera Maru Díaz (Podemos), para los países con un nivel de vida más bajo --como Bulgaria, Croacia, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, República Checa, Rumania, Antigua República Yugoslava de Macedonia, Turquía y Serbia-- se mantenían los 250 euros mensuales de anteriores convocatorias.
Para los que se considera que tienen un coste de vida medio --Alemania, Austria, Bélgica, Chipre, Francia, Grecia, Italia, Malta, Países Bajo y Portugal-- la cuantía mensual se ha elevado a 300. Y para los considerados más caros, como Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Islandia, Luxemburgo, Noruega, Reino Unido, Suecia, EEUU, Asia y Oceanía, se ha aumentado hasta los 350.
Becas más largas
Además, en todos los casos, se ha extendido el periodo que cubre la beca, llegando hasta los nueve meses y alcanzando así la totalidad del curso académico. Finalmente, el 60% de los becados --74 estudiantes-- recibirán la ayuda durante el curso completo. Con los cambios introducidos en la cuantía mensual, el montante máximo individual de la beca ha crecido de los 1.750 euros de la convocatoria anterior hasta los 3.150 euros para aquellos que hacen su estancia en los campus de los países más caros para vivir.
Las becas complementarias Erasmus+ introducían en la convocatoria de este año --dotada con 275.000 euros-- otros cambios con el objetivo de «remover» los obstáculos económicos que podían dificultar la movilidad internacional de los estudiantes universitarios con menos recursos, según defendieron desde la DGA.
Para ello, se ha elevado además el umbral protegido por renta del 75% actual al 80% del crédito disponible. De esta forma, se prima el criterio de renta frente a la nota a la hora de la selección de los alumnos becados.
El nuevo sistema de becas también ha añadido una deducción del nivel de renta para las familias monoparentales, con el objetivo de hacer frente a la situación de vulnerabilidad y dar respuesta a las desigualdades y dificultades que suelen sufrir. Díaz también ha actualizado y aumentado las cuantías en el resto de ayudas a la movilidad de los estudiantes, con las becas salario de más de 900 euros al mes para estudiantes «excelentes», o con el incremento del 25% en las ayudas a la movilidad en la comunidad.
