El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón y las patronales empresariales de la comunidad acordaron este miércoles reforzar la comunicación a los profesionales médicos para realizar los partes de baja y alta a los pacientes por covid en el mismo acto médico, de manera general. La intención es aliviar la presión asistencial en los centros de salud.
Así se puso de manifiesto en una reunión que la consejera de Sanidad, Sira Repollés, mantuvo con los presidentes de Cepyme Aragón, Aurelio López de Hita, y CEOE Aragón, Ricardo Mur. El motivo del encuentro fue revisar el procedimiento de gestión de la incapacidad temporal (IT) en el marco de esta séptima ola epidémica de coronavirus ante la «preocupación» de las empresas por el impacto que están teniendo las bajas en el sistema productivo.
De acuerdo con las informaciones recibidas por la CEOE Aragón, hay grandes empresas que tienen un 25% del personal de baja y algunas pequeñas han tenido que cerrar por tener a los trabajadores contagiados. Durante la reunión, las partes manifestaron su voluntad de «colaboración mutua» en la mejora y agilización de los mecanismos para gestionar los partes de baja, según informaron fuentes del Ejecutivo.
La emisión de la baja laboral deberá ser validada por un médico y además, para hacer frente a la misma problemática, el Gobierno de Aragón estudia incorporar inspectores médicos de los centros de salud que tramiten las bajas por infecciones del coronavirus, el 50% de las cuales proceden de autodiagnóstico.
Colaboración de las mutuas
Respecto a la petición de las organizaciones empresariales para que las mutuas puedan emitir los partes, el Departamento de Sanidad explicó que el marco legislativo estatal «no contempla esta opción», aunque sí se acordó «intensificar la colaboración con las mutuas», de modo que puedan reforzar las labores de seguimiento y control de los procesos.
La decisión adoptada en Aragón se extiende a otras comunidades, donde también se busca agilizar las bajas por covid, que están atascadas por el colapso de la Atención Primaria. Por ejemplo, Cataluña, Murcia y la Comunidad Valenciana darán el alta laboral a los enfermos a los siete días de la cuarentena de forma programada, mientras que Galicia plantea poder contratar a licenciados y graduados en medicina sin especialidad para atajar el problema.
En el caso catalán, la baja laboral se podrá obtener, además, a través de una llamada a las farmacias que colaboran con Salud, «una medida excepcional y temporal» dado el gran incremento de visitas a los centros de Primaria. Además de esta medida, Cataluña reclama al Gobierno que autorice las «declaraciones de baja autorresponsables» de las personas contagiadas, para lo que se necesitaría un real decreto.
En Valencia, el paciente podrá pedir por internet la baja y el alta simultánea a los 7 días del inicio de los síntomas de los casos que se diagnostiquen en los puntos de muestras de la red pública, los laboratorios privados y las farmacias, mediante un enlace que se activará este viernes. A través de la inspección sanitaria, el parte de baja se comunicará al INSS, que lo trasladará a las empresas.
Las personas que se hayan hecho un test de autodiagnóstico deberán confirmar el positivo en cualquiera de los dispositivos acreditados, incluyendo laboratorios privados u oficinas de farmacia.
Estos planteamientos se formulan cuando la ola del coronavirus sigue marcando récords. España, el el segundo país europeo con más contagios en un día -hoy 134.942-, ha superado los 3.000 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia acumulada en 14 días, lo que se traduce en un incremento de bajas laborales que está colapsando las ya de por sí diezmadas consultas médicas, según denuncian asociaciones de facultativos. Sindicatos como el CSIF exigen que las bajas se tramiten «en un solo parte» expedido por otros organismos «para descongestionar de esta carga burocrática a los médicos de familia.
