El Gobierno de Aragón ya tiene los mimbres para diseñar el proyecto de presupuestos de la comunidad autónoma para 2023, que volverán a superar la cuantía máxima histórica que se ha registrado en los dos últimos ejercicios. La comunidad recibirá casi 4.429 millones de euros del Estado, un 25% más que en el ejercicio anterior, procedentes de las entregas a cuenta y de la liquidación del ejercicio 2021.
Con estas cifras y la tasa de referencia, que el Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado en Madrid fijó en el 0,3% para las comunidades, el Gobierno liderado por Javier Lambán ya tiene el "70%" del techo de gasto de presupuesto para el próximo año. Las de 2023 serán las últimas cuentas del cuatripartito formado por el PSOE, Podemos, PAR y CHA, que agota la legislatura con "vocación de continuidad", como recordó ayer el consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Carlos Pérez Anadón.
La intensa jornada para los responsables de todas las Haciendas autonómicas, tras una reunión de casi cinco horas en el ministerio, culminó para el representante aragonés con una "moderada satisfacción".
Las transferencias del Estado a la comunidad son las más altas de la historia, lo que permitirá, dijo Pérez Anadón, "dar un paso fundamental en la elaboración de unos presupuestos para 2023 que permitan mantener el escudo social y apoyar a las empresas y emprendedores para que esta comunidad siga adelante con los mayores niveles de igualdad".
El desglose de cifras en Aragón supone que la comunidad recibirá 4.240 millones de euros en concepto de entregas a cuenta. Es la mayor cifra de la historia y supone un incremento del 11% con respecto a los 3.860,4 millones de euros recibidos en 2022.
Las entregas a cuenta son la parte sustancial del sistema de financiación autonómica y se calculan a partir de los recursos tributarios que se estima se ingresarán a lo largo del ejercicio en concepto de IRPF (la tarifa autonómica) y los porcentajes que marca la ley que corresponde a cada comunidad autónoma del IVA e impuestos especiales y que el Estado adelanta.
Según informó María Jesús Montero durante el encuentro, en total, las comunidades percibirán 124.291,86 millones en concepto de entregas a cuenta. Es la mayor cifra de la historia y supone un aumento del 11% respecto a 2022.
El incremento de las entregas a cuenta es el reflejo de la previsión de que prosiga el crecimiento económico en España el próximo ejercicio y también, señalan desde el Ejecutivo central, «es síntoma de que las medidas que desarrolló el Gobierno para mitigar las consecuencias económicas de la pandemia y ahora de la invasión de Ucrania surten efecto para dar continuidad a la recuperación y a la creación de empleo».
Pérez Anadón incidió en esta idea, ya que, pese a la inflación y la incertidumbre que reina en la economía mundial, la economía española y aragonesa da muestras de buena salud. Así lo refleja, destacó, que «sigue creándose empleo, la inversión está un 16% por encima del nivel prepandemia y las exportaciones siguen al alza».
De hecho, recalcó, pese a las dificultades, el Gobierno de España mantiene las previsiones de crecimiento para 2023, donde solo se producirá «una desaceleración del ritmo de crecimiento, pero todavía con una tasa de crecimiento muy dinámica».
En el año 2023, además, se efectuará la liquidación del sistema de financiación del año 2021. Las previsiones apuntan a que Aragón, por este concepto, percibirá 188,7 millones de euros. Ello significa que la comunidad dispondrá de 4.428,8 millones de euros provenientes del sistema ordinario de financiación autonómica, un 25% más que un año antes. En total, sumando la liquidación de 2021 y las entregas a cuenta de 2023, el conjunto de las comunidades de régimen común contará con recursos por un total de 134.335,65 millones el año que viene.
Con estas cifras, el Ejecutivo autonómico enciende la maquinaria para un mes y medio de preparación de los presupuestos de 2023 en el seno del cuatripartito. "Estas entregas a cuenta nos permitirán tratar de hacer un presupuesto con mayoría parlamentaria, que esté aprobado el 1 de enero y que tenga 365 días de vigencia, pero que huya de los triunfalismos porque la situación en la que estamos exige mucha responsabilidad y prudencia", añadió Pérez Anadón.
Mientras en Aragón se da por hecho que la comunidad tendrá unos nuevos presupuestos, no ocurre lo mismo con los del Estado. Por eso, la ministra Montero anunció ayer la intención de "desacoplar" las entregas a cuenta a las comunidades autónomas de la aprobación –o no– de los Presupuestos Generales del Estado. En cualquier caso, aseguró el consejero autonómico, Aragón recibirá estos fondos, antes o después.
Por último, el consejero mostró su rechazo "frontal" a las propuestas de comunidades autónomas como Andalucía o la Comunidad Valenciana, que intentaron introducir el debate para la creación de un fondo para estas regiones supuestamente "infrafinanciadas".
"Aragón está frontalmente en contra de esa propuesta y así lo trasladamos. Eso sería hablar por la puerta de atrás de la reforma del sistema de financiación, y nosotros queremos que se sigan los cauces", recalcó.
Nuevo impuesto sobre los residuos
El Gobierno de Aragón negociará el próximo año con el Gobierno de España en las comisiones mixtas de transferencias el desarrollo y la aplicación del nuevo impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos, aprobado recientemente por el Congreso y el Senado y que entrará en vigor el próximo ejercicio.
Su recaudación, avanzó el consejero de Hacienda del Ejecutivo autonómico, Carlos Pérez Anadón, se cederá de forma íntegra a las comunidades autónomas, si bien, no quiso concretar cuáles son las previsiones de recaudación para el próximo ejercicio. "No será muy oneroso", se limitó a decir.
El impuesto, recordó, va en línea con las demandas de la Unión Europea para incrementar la fiscalidad medioambiental en España. Todavía deberá concretarse con el Gobierno central quién deberá abonar el impuesto.
