El Casademont Zaragoza naufraga ante el Gran Canaria (54-63) y deja muchas dudas antes del duelo ante el Villeneuve

Era un partido con trampa y el Casademont Zaragoza cayó en ella. Las pupilas de Cantero cuajaron en el Príncipe Felipe uno de los peores encuentros de la temporada y no pusieron oposición a un Gran Canaria que se llevó a la isla una victoria vital en sus aspiraciones por mantener la categoría (54-63).

Comenzaron bien el choque las aragonesas y suyas fueron las primeras ventajas gracias a la versatilidad de Leo Fiebich, que anotó 6 de los primeros 8 puntos del equipo. Pero pronto comenzaron los problemas para las de Cantero, que permitieron que las canarias se enchufaran al encuentro a base de segundas oportunidades. Cargando muy bien la pintura, las isleñas equilibraron las fuerzas de la mano de Koné. Los ataques del Casademont eran cada vez eran más espesos y el equipo no encontraba la manera de anotar con fluidez, así pues el primer cuarto terminó con ventaja para las visitantes (12-16)

No pudo comenzar peor el segundo cuarto para las aragonesas, ya que a los 5 segundos la alemana Fiebich cometió su segunda falta y ya no volvería a la cancha en la primera parte. Las canarias, a pesar de su corta rotación y sus problemas con las personales, seguía dominando el rebote y estiraron la ventaja hasta los 6 puntos.

Fue entonces cuando apareció Mariona Ortiz, que, con unos minutos brillantes, igualó el duelo con dos triples prácticamente consecutivos. No se descompuso sin embargo Gran Canaria y con un buen final de cuarto de la Holesinska y Hollivay volvieron a poner por delante a las canarias cuando se llegaba al descanso (27-32).

Tenía que reaccionar el Casademont Zaragoza si quería que la victoria se quedara en el Príncipe Felipe, pero no fue capaz de hacerlo. En la reanudación, Koné hacía mucho daño por dentro y las canarias también acertaban desde la larga distancia y llegaron a alcanzar una renta de +13 mientras las aragonesas acumulaban fallos y pérdidad inexplicables y, lo más preocupante, perdían su identidad defensiva. Con Gatling y Vega Gimeno muy desacertadas y Fiebich anotando pero sin tener su mejor partido, la única que respondía en el Casademont era Mariano Ortiz. Pero no era suficiente, y el luminoso llegó a los últimos diez minutos con un sorprendente 40-54.

Hasta a 16 puntos se colocaron las canarias antes de que, en un ataque de orgullo y rasmia, las zaragozanas redujeron distancias hasta colocarse a neuve puntos y siete minutos por jugarse. Pero no era el día del Casademont, que se mostró muy cansado tanto física como mentalmente y no pudo rebajar más una renta que se mantuvo todo el cuarto entre los 10 y los 12 puntos.

Si todo eran malas noticias, con el partido ya decidido, Leo Fiebich acabó el choque en el suelo y doliéndose de su rodilla poniendo en el aire su participación para el esperado encuentro de vuelta ante el Villeneuve. Un encuentro al que no va a llegar el Casademont con buenas sensaciones y en el que mucho tendrá que mejorar para tener alguna opción de remontar los 16 puntos ante las francesas y seguir con vida en la Eurocup. Pero cada partido es un mundo.

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