VIOLENCIA SEXUAL

El violador excarcelado en Zaragoza no podrá pedir una indemnización al Estado

Los juristas señalan que no se trata de un caso en el que un inocente acabara en prisión. Ya es firme la reducción al joven que dejó moribunda a una prostituta en Zaragoza

Jalal Aarabou fue condenado a 12 años de prisión que se han reducido a 7 por violar a una vecina de Zaragoza.

Jalal Aarabou fue condenado a 12 años de prisión que se han reducido a 7 por violar a una vecina de Zaragoza. / EL PERIÓDICO

Jalal Aarabou ya disfruta de la libertad. Dos meses antes de que acabara su condena de 12 años de prisión por violar a una vecina de Zaragoza, la conocida como ley del solo sí es sí le ha permitido adelantar este momento tras la revisión a la baja de su sentencia. Eso sí, no podrá solicitar indemnización alguna por parte del Estado.

Penalistas consultados por este diario como José Cabrejas o Eladio Mateo coinciden en afirmar que no se trata de un inocente que ha estado en prisión de manera provisional de forma errónea, sino de un acusado condenado por un delito que sigue existiendo pero que es castigado con penas inferiores. «El cambio de ley le ha beneficiado y por ello se le ha modificado la sentencia, pero la culpabilidad no está en debate», señala Cabrejas, quien afirma que el Tribunal Constitucional que estableció el derecho a indemnización por casos de prisiones provisionales que no acabaron en condena.

La víctima de estos hechos, que rechazó la excarcelación aprobada por la Audiencia de Zaragoza, fue una mujer de 60 años y vecina de la capital en el momento en el que fue abordada por este joven que tenía 24 años. Era una lluviosa noche de noviembre del año 2000 cuando el condenado, que conducía un coche blanco viejo, la abordó cuando caminaba por la calle de Salvador Minguijón, en el zaragozano barrio de Las Fuentes, diciéndole “corazón, que te has mojado” e invitándole a subir al vehículo, mientras le mostraba una placa y un carnet de policía.

Ella confió en él porque creía que era compañero de su marido, que es agente policial pero, según su relato, en vez de llevarla a su domicilio la trasladó hasta una de las orillas del río Ebro, a la altura del puente de Santiago, donde la violó. «Me amenazó con la hoja de unas tijeras y abusó de mí», manifestó la denunciante durante el juicio, mientras aseguraba que el procesado le mostró una placa de policía para ganar su confianza cuando se ofreció a llevarla en su coche en un momento en que llovía intensamente. Subí al coche porque, al enseñarme la placa, pensé que era compañero de mi esposo, que es policía nacional», declaró la mujer. «Luego me llevó al río, me obligó a meterme en el agua y me forzó amenazándome con la hoja de una tijera», relató. A continuación, aprovechando que el supuesto agresor «no atinaba a vestirse», ella le arrebató la hoja de tijera y la placa, se escapó y buscó refugio en un comercio. Durante el juicio, Jalal Aarabou, quien estuvo siete años en búsqueda y captura internacional por estos hechos, los negó y aseveró que la conoció en un local de alterne.

Por otro lado, la rebaja de condena a José Manuel Calvo Ropero, que violó y abandonó moribunda a una prostituta en un descampado de Zaragoza en 2020, ya es firme. Ninguna de las partes recurrieron la decisión de rebajarle casi cuatro años menos a este condenado, tal y como solicitó su abogado defensor, José Luis Melguizo.

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