SUCESOS EN ARAGÓN

Un ciclista recupera una navaja ensangrentada de la reyerta mortal de Castellote

El arma fue localizada en la cuneta de la carretera que una Castellote con el pantano de Santolea

Esta es la plantación de marihuana que originó la reyerta mortal en Mas de las Matas

Guardia Civil

El Periódico de Aragón

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La Guardia Civil de Teruel ya tiene una prueba más que le ayudará a esclarecer la reyerta mortal entre albaneses que se desencadenó hace un par de semanas en el pantano de Santolea: una navaja ensangrentada. El hallazgo del arma se remonta al pasado sábado 29 de julio cuando un ciclista se encontró con ella en la cuneta de la carretera que conecta el municipio de Castellote con el pantano de Santolea. Ahora ha sido remitida al Equipo de Criminalística del Instituto Armado, que llevará a cabo un análisis exhaustivo para intentar saber quién la empuñó y contra quién.

Las alarmas saltaron el pasado viernes 21 de julio por la noche cuando un vehículo con matrícula francesa abandonó en Mas de las Matas a dos individuos heridos con varias puñaladas. Uno de ellos falleció en el centro de salud de la localidad y el otro fue trasladado con heridas graves al Hospital Universitario Miguel Servet de Zaragoza. Al mismo tiempo, un tercer individuo apareció con heridas similares en la localidad vecina de Castellote y, tras ser derivado en ambulancia al centro de salud de Mas de las Matas, fue derivado al Miguel Serve

En paralelo, la Guardia Civil ya había emitido una orden de búsqueda y captura de ese primer vehículo que abandonó a dos heridos en Mas de las Matas y, casualmente, los agentes le dieron el alto en la A-226, a la entrada de Castellote. Detuvieron a sus tres ocupantes y, tras las correspondientes indagaciones, los agentes reconocieron que esos vehículos de matrícula francesa estaban relacionados con una investigación abierta el pasado mes de marzo en relación a tres plantaciones de marihuana ubicadas en las inmediaciones del pantano de Santolea. Según la Guardia Civil, eran "regentadas" y "guardadas" por una parte de los detenidos.

Fue entonces cuando los guardias civiles entraron a las tres plantaciones de marihuana y sus zonas de vida, deteniendo allí mismo a un individuo que la custodiaba en ese momento y estaba refugiado en una tienda de campaña. Dado el revuelo policial que se levantó, un segundo individuo huyó de otra plantación cercana, si bien fue detenido a las horas en la localidad vecina de Torres del Mercader. Durante el registro de las plantaciones, los agentes se percataron de que existía una zona de aparcamiento junto a las plantaciones y, allí, apreciaron restos de sangre. Esto les llevó a pensar que podrían ser compatibles con el desarrollo de una pelea.