La compañía aragonesa de teatro Arbolé hace balance de lo que han sido estos tres años de animación en el Parque del Agua Luis Buñuel, desde su apertura en 2008. Un total de 129.556 espectadores han pasado por el teatro, 42.500 este año, registrando así un descenso en la ocupación respecto al año pasado que se mantenía en 57,8% y ahora no llega al 55%, aunque supera el 40% de media española. El gerente de la compañía, Esteban Villarrocha, cree que "este balance es positivo pero no como esperábamos". A pesar de que la oferta cultural que da el teatro se ha ampliado con programación para jóvenes y adultos, el principal objetivo de la compañía sigue siendo la programación infantil y familiar, que en estas tres temporadas registra 75.200 espectadores. "Haremos hincapié en la parte didáctica, como por ejemplo talleres en colegios, creemos que esa relación con la escuela y los niños es la que nos salvará de tener espectadores en el futuro, son el público de hoy y también del futuro".

El gerente asegura que, aunque están "en equilibrio" por los recortes que han sufrido por parte del Gobierno de Aragón (se concretan en un 60%), van a mantener los precios como lo han hecho desde que empezaron en 2008.

A pesar de este recorte del Gobierno de Aragón, Arbolé se mantiene con las subvenciones del Ayuntamiento de Zaragoza y del Ministerio de Cultura. "Queríamos que fuera el público quien nos mantuviera, no hemos aumentado el precio de la entrada aunque han aumentado todas las cosas, y si no fuese por las ayudas públicas no podría hacerse", cuenta el gerente. "Nos gustaría informar a cada espectador de que más de un euro de cada entrada lo paga el ayuntamiento, un euro el Ministerio de Cultura y treinta céntimos el Gobierno de Aragón. Si no nos financiasen la entrada tendría que ser más cara y no sabemos si el público vendría", explica Villarrocha.

En lo que están de acuerdo el gerente de Arbolé y el consejero de Cultura del ayuntamiento, Jerónimo Blasco es de que "son tiempos de cambio y de estructurar las cosas de otra manera", por lo que el ayuntamiento apuesta por este tipo de empresas concertadas, que se mantienen con capital público y privado. "Donde sí que vamos a tener que recortar es en el Auditorio, en el Teatro del Mercado y en el Principal", afirma Blasco. Desde el ayuntamiento se van a estudiar los usos de los parques de Zaragoza, ya que "la gente pide los parques para más cosas que pasear, quieren deporte, ocio, restauración... cultura piden poca, pero cuando lo conocen les encanta".

También asegura que "en Zaragoza vamos a más en programación y producción de cultura, pero generamos más actividades de lo que crecen en los espectadores", y aquí es donde entra Arbolé. La compañía ha iniciado esta última temporada una Escuela de Teatro para niños entre 6 y 12 años, donde se les pretende acercar al teatro y a la oferta cultural de una forma diferente de la que lo hacen en los colegios, pero no con el único objetivo de formar actores. "Arbolé no solo hace el papel de agenda cultural sino que genera espectadores", explica Jerónimo Blasco.