Por qué Federico García Lorca no emigró a México cuando sabía que estaba perseguido y todo el mundo le recomendaba la emigración? Es una pregunta a la que se ha venido dando vueltas desde el año de su muerte y que Manuel Francisco Reina ha sido el primero en darle respuesta. Su última novela, Los amores oscuros (Temas de Hoy) arranca con la frase de Juan Ramírez de Lucas: "Yo fui el último amor de Lorca, y tal vez, la razón de su muerte". Y ahí está la respuesta a la gran pregunta. Así lo desgranó ayer en la Feria del Libro de Zaragoza el propio Manuel Francisco Reina, acompañado de la escritora Magdalena Lasala y del coordinador del programa de la cita, Juan Bolea.

La frase corresponde a Juan Ramírez de Lucas, el último amor de Lorca y al que iban dirigidos Los sonetos del amor oscuro del granadino. "Él ya sabía que los buscaban y su último pensamiento, sin embargo, fue para su amor", explicó Reina que desgranó que ha estado dos años "enlorcado y haciendo una investigación rigurosa" para escribir este libro, aunque reconoció que cuando le llegó esta historia no se la podía "ni creer" hasta llegar a escribir este Los amores oscuros. Una novela que "aunque lo sea, tiene muy poco de ficción, por no decir nada. Simplemente he utilizado la fórmula de la novela pero lo que cuento es verídico. En España tenemos un pudor absurdo a utilizarla y no sé muy bien por qué", defendió ayer Reina en el patio de Capitanía.

Entonces, ¿por qué esta historia había estado silenciado hasta ahora? "Juan Ramírez de Lucas se sintió culpable toda la vida de la muerte de Lorca porque si no se fueron es porque él era menor de edad y necesitaba el permiso paterno (su padre no aprobaba la relación) para salir del país. Y, además, Ramírez de Lucas, tenía el síndrome del superviviente", aseveró Reina.

CAPACIDAD DE SEDUCCIÓN "Federico García Lorca tenía una capacidad de seducción que podía con todo y en cuanto conoce a Juan Ramírez de Lucas se produce un flechazo a primera vista", contó Reina que situó la figura de Lorca en un plano muy elevado: "Era un genio pero la sabiduría emocional, su capacidad de entrega de compromiso, está a la altura de su genialidad literaria", dijo antes de defender que ahora era el momento de abordar esta obra porque sentía que "o se recogían estos testimonios o estábamos en un momento en el que se iban a perder para siempre".

Manuel Francisco Reina, que aseguró sentirse "mejor" que en su propia casa en Zaragoza donde ya es un habitual de todas las ediciones de la Feria del Libro, no quiso desvelar mucho más de la novela porque animó a los lectores a que se la leyeran: "Váis a disfrutar y váis a sufrir", apuntó antes de dar un consejo: "Leerla a la vez que Los sonetos del amor oscuro y entonces veréis que estos poemas de Lorca son un itinerario del amor de ambos que relata la novela". De ahí precisamente que el libro se llame Los amores oscuros: "Aunque a la editorial no le hacía mucha gracia, defendí que era el título adecuado porque es el amor de Los sonetos del amor oscuro, pero es que, además, está el juego de que es una historia llena de luz, radiante, de solidaridad, entregas y renuncias".

Magdalena Lasala, presentadora del acto, aseguró que es una "impactante novela que deja sin aliento, un camino por la vida, las relaciones y el ser de Federico García Lorca que va más allá de sus personajes y su tiempo. Manuel Francisco Reina desgrana las claves del amor de Lorca por un corazón gemelo al suyo al que se entregó en sus dos últimos años de vida".

Antes de concluir el acto, el público aún se planteó una última cuestión alrededor de este amor. ¿Juan Ramírez de Lucas sabía dónde estaba enterrado Lorca? "Tampoco creo que importara mucho porque él ya llevaba el sufrimiento encima, pero no lo sabía, porque él se despide de Federico en Atocha cuando Lorca se va a Granada a esperar a que Juan le llamé cuando tenga los papeles arreglados. En Granada se desencadena todo y es asesinado, por lo que no tiene posibilidad de saberlo", concluyó Manuel Francisco Reina.