La verdad de un guisante

EL SENTIDO DE UN GUISANTE

AUTOR Rubén Negro

EDITORIAL Círculo Rojo

A veces es indiferente qué es la realidad y qué es la ficción. Si el protagonista es uno mismo, el vecino o el propio lector tampoco aporta mucho en determinados momentos. El periodista y escritor abulense Rubén Negro (que ha trabajado durante varios años en Aragón) acaba de publicar su primera novela, El sentido de un guisante (editado por Círculo Rojo).

Un libro que, en realidad podría ser 27 (que son los capítulos con los que cuenta), porque, a pesar de su evidente conexión, la obra alcanza un punto en el que casi cada palabra adquiere sentido independiente. Algo que es un arma de doble filo, pero que Rubén Negro resuelve con la sencillez de que construye una historia alrededor de un ¿amor (o más bien de desamor? Esas andanzas de sí o no que enganchan al lector con la ingenuidad del que no quiere imaginarse el final.

El autor asegura en la contraportada de la novela que "no es lo mismo contar una historia que escribir una historia. La historia la escriben las ganadores y ésta será una historia de perdedores". Y es desde ese punto de vista desde el que se puede afrontar El sentido de un guisante a través de otro punto de vista. El de la batalla por sobrevivir en una vida en la que muchas veces parece darte a elegir en qué bando quieres estar. Pero, como deja bien claro la novela, ¿quién define lo que es un ganador y un perdedor? Quizá en los guisantes de Mendel está la clave de esta primera novela de Rubén Negro. Ahí y en su blog www.trapseia.com, donde, asegura el autor, se encuentra el complemento ideal a esta lectura. 79 páginas intensas de una deshistoria que nunca ocurrió. O tal vez sí. O solo a medias. Qué más da. Poco importa.