El Real Zaragoza inicia esta tarde (17.00) su Liga particular, un torneo diferente, obligado a abrir todas las puertas para evitar el descenso. Juega hoy un partido de campeonato con un objetivo prioritario: ganar al Mallorca. La peligrosa situación del conjunto de Víctor Muñoz, que debuta en La Romareda como entrenador de su equipo del alma frente al club que le dio su primera oportunidad como técnico en la élite, no deja margen para otro resultado. El triunfo de la Copa frente al Bar§a en el Camp Nou tendrá hoy un significado ornamental, aunque sería interesante conservar de esa cita la actitud batalladora y ordenada de los futbolistas y desterrar la pobre imagen que se ofrece con el balón en los pies. Víctor volverá a presentar una alineación con dos delanteros, lo que alegrará la vista de la afición, y a exigir la tensión y la responsabilidad que pide el momento, pero, en este deporte, para empezar a hablar hay que tener la pelota y darle un sentido, lo que en Barcelona no ocurrió.
Los tres puntos pueden llegar por muchos caminos, si bien existe uno obligado y que el Real Zaragoza ha olvidado especialmente en casa. Su amnesia goleadora le ha empujado al abismo, y parece complicado que Víctor pueda elevar por sí solo la inspiración de sus chicos ante la portería rival por mucho que tácticamente los acerque a ella. Las dudas nacen en la habitual negación rematadora, se confirman en la poca capacidad creativa y se reproducen si al enemigo le da por hacer algo más que aceptar un cómodo papel de visitante sin grandes pretensiones.
SIN ETOO Y CON DELIBASIC ¿Qué querrá este Mallorca sin Etoo, su principal valor? La ausencia del camerunés se ha dejado notar: cuatro derrotas y un empate en Soin Moix en las últimas cinco jornadas. El declive del equipo de Luis Aragonés, quien contará con el recién incorporado Delibasic para darle lustre al ataque, no asegura nada, porque de este nuevo Zaragoza tampoco se sabe mucho. Viaja con sus viejos defectos y asegurar a estas alturas que Víctor Muñoz le ha imprimido su sello personal se antoja precipitado.
Existe, es cierto, una atmósfera más positiva que invita al optimismo para este encuentro, aunque mucho más enraizada en la personalidad de un entrenador dialogante, impulsivo y metódico que en un salto cualitativo real del equipo. La llegada del técnico ha elevado el nivel de complicidad. Sin embargo, hoy habrá que comprobar la longevidad de esa típica respuesta colectiva de sobreesfuerzo cuando se produce un cambio en la dirección.
Cuartero seguirá junto a Ponzio en el eje de elaboración, Villa saldrá de inicio junto a Yordi, Cani ocupará la banda derecha por la baja por sanción de Galletti y Savio o Vellisca, a la espera de la evolución del brasileño, se harán cargo del ala izquierda. De la defensa, lo mejor como siempre, no se mueve nada. Ganar, huir del descenso, alejarse de los fantasmas... Frente al Mallorca empieza el torneo apertura.
