El Pla-Za cosechó ayer su tercera derrota consecutiva en la piscina Sant Sebastiá, cuyo dueño, el Atlétic Barceloneta, ahogó al equipo aragonés por 11-5 y alargó su mala racha en la competición.

El equipo de Emilio Bautista fue incapaz de mantener su excelente comienzo de partido --dio la vuelta a un marcador adverso de 3-0, adelantándose por sorpresa por 3-4-- y se dejó arrastrar confiado, mientras el Barceloneta, uno de los conjuntos más potentes de la División de Honor a pesar de haber sufrido siete bajas respecto a la temporada pasada y al que dirige el zaragozano Santi Fernández, sacó a combate la artillería pesada y empezó a atacar sin piedad la portería defendida por Miguel Angel González, con un inspirado Karol Baco --cuatro goles-- que se tomó venganza contra sus excompañeros.

Algo falla en las mentes y los brazos de los jugadores zaragozanos. Aunque gozó de doce situaciones de superioridad númerica --por sólo siete en contra--, el Pla-Za no supo aprovecharse de las circunstancias claves del partido, como ya le sucedó la pasada jornada en casa ante el Martiáñez canario. Las jugadas, una y otra vez, parecían repetirse: ataque estéril del Pla-Za y contraataque fructífero del Barceloneta, que, tras marcar seis goles de manera consecutiva y no encajar uno solo, fue acumulando una ventaja ya insalvable en el último tramo del choque.

En las filas del bloque aragonés sólo supo resolver ante el guardameta contrario --el internacional español Angel Andreo-- Ramsés Juravle, quien mantuvo el tipo y el nivel habitual a pesar de haber sufrido una caída de moto hace un par de días y, como consecuencia, sentir molestias en un brazo.

El Pla-Za, con tres victorias y otras tantas derrotas, recibe el próximo sábado en la piscina del Parque Deportivo Ebro a otro de los aspirantes al título de Liga, el Barcelona, contra el que tratará de volver a encontrar el buen rumbo con el que inició la Liga.