Con las estaciones aragonesas todavía a medio gas el primer balance de la temporada no puede ser más positivo. Unas 50.000 personas se acercaron a practicar el esquí a las estaciones del valle del Aragón, Astún y Candanchú, durante el pasado puente de la Constitución, cifra que supera ampliamente la registrada hace un año. A este elevado número de esquiadores habría que añadir también a los numerosos turistas que se acercan a las estaciones sin calzarse los esquís. Pese a la satisfactoria cifra de esquiadores, tanto Astún como Candanchú tienen capacidad para recibir a más practicantes del deporte blanco, puesto que no se registraron aglomeraciones ni en las pistas ni en los remontes. Los atascos, e importantes, se produjeron en las carreteras de acceso y en los aparcamientos.

Los aficionados al deporte blanco, como los que se estrenaron en el puente, pueden disfrutar esta temporada de tres importantes novedades de Aramón, centradas en facilitar los accesos a las pistas con un único forfait y en acercar la compra de los pases a los aficionados zaragozanos. El departamento de deportes de El Corte Inglés permite hacerse con las entradas para cualquiera de las estaciones aragonesas desde Zaragoza. En cuanto a los forfaits , Aramón lanza uno especialmente pensado para las familias con niños pequeños y otro que permite el acceso a las pistas durante 20 días no consecutivos, por lo que el esquiador paga por el tiempo realmente consumido con los esquís.

MAS PISTAS Y MAS SEGURIDAD Cerler, Formigal y Panticosa son las estaciones de Aramón que más se han renovado para la nueva temporada, mejorando tanto las pistas como los accesos, si bien las dos turolenses, Javalambre y Valdelinares, también han mejorado notablemente su dotación de cañones de nieve, motos y ambulancias, reforzando así la seguridad de los esquiadores. Así, Cerler cuenta con tres nuevas pistas, dos negras y una azul, en la zona del Ampríu, ha renovado su sistema antiavalanchas y el de innivación artificial.

Por su parte, Formigal ha ampliado su superficie esquiable un total de diez kilómetros más, con pistas de varios niveles, y ha instalado cuatro nuevos telesillas que entrarán en funcionamiento a partir del próximo mes de enero. Tanto en Formigal como en Panticosa se está trabajando intensamente por mejorar no sólo las pistas, sino también los accesos y zonas de aparcamiento, que suelen terminar siendo las más problemáticas para los miles de personas que intentan esquiar cada fin de semana en Aragón.