Dieciocho jugadores del primer equipo --Doblas, Leo Franco, Lanzaro, Laguardia, Contini, Mateos, Goni, Abraham, Paredes, Obradovic, Edu Oriol, Pinter, Ponzio, Lacruz, Juan Carlos, Lafita, Braulio y Uche-- y los futbolistas del filial Ortí, Joel Valencia y el meta Pablo Alcolea arribaron ayer por la tarde a San Leonardo de Yagüe para realizar el primer stage de pretemporada del Zaragoza, que se extenderá hasta el 27 de julio. Falta Da Silva, pero la descripción del grupo que esta mañana comenzará a sudar en Navaleno ya deja a las claras el grado de provisionalidad. La historia no es nueva. Es la canción del verano, sobre todo, consecuencia de la debilidad económica del club, que complica mucho hacer valer sus cartas cuando hay competencia de otros equipos por un futbolista.
En las dos anteriores temporadas el Zaragoza se acercó a este stage con muchos frentes abiertos. Esta vez, con la nueva realidad del concurso de acreedores, que supone una dificultad añadida en la conformación de la plantilla, la indefinición en el grupo como mínimo se ha mantenido.
EL CAMBIO Los primeros años de Agapito Iglesias en el club estuvieron marcados por una mayor estabilidad en los proyectos deportivos, pero desde su retorno a Primera en el 2009, el Zaragoza ha convertido cada verano en un carrusel de cambios, de altas y bajas, con proyectos muy renovados. En éste, si cabe, un poco más, ya que la revolución en la plantilla va a ser hasta mayor. En todo caso, la definición es la misma cuando se llega a San Leonardo: provisionalidad.
El Zaragoza tiene, en mayor o menor medida, a Lafita, Uche, Obradovic, Contini --el italiano por su deseo de irse-- Braulio, Leo Franco o Paredes en la rampa de salida y, en función de los que se vayan, le restan por incorporar seis jugadores más a los cuatro que ya han llegado --Mateos, Juan Carlos, Abraham y Edu Oriol-- . Algunos tienen nombres y apellidos: el centrocampista Jonathan dos Santos (Barça B), el delantero Alfaro (Sevilla), el extremo Pablo Barrera (West Ham) y el lateral derecho Efraín Juárez (Celtic) son los fichajes más cercanos. Con todos hay negociaciones que se espera culminar. La llegada de Jonathan es la más clara de las cuatro. Además, también se busca un delantero centro y otro centrocampista. Entre entradas y salidas, no menos de 12 operaciones por concretar.
LOS PRECEDENTES En el 2009, tras volver a Primera, se llegó a Navaleno con 11 jugadores con futuro incierto. Eran Ewerthon, Zapater, Ayala, Pavón, Paredes, Generelo, Songo´o, Pulido, Braulio, Pablo de Barros y Antonio Hidalgo y se habían concretado los fichajes de Carrizo, Uche y Pennant. Hasta el cierre del mercado arribaron al equipo dirigido por Marcelino García Toral, Abel Aguilar, Pablo Amo, Babic y Lafita, pero no lo hizo un ariete. Mientras, el Zaragoza pudo dar salida a Zapater, Generelo, Hidalgo o Pablo de Barros y lo intentó hasta el final sin éxito con Songo´o, Pulido y Paredes que empezaron el curso como descartes y sin opciones, pero que acabaron teniendo minutos, muchos en el caso de Paredes y Pulido.
El verano pasado y al llegar a Navaleno había en el equipo que dirigía Gay unos 9 futbolistas en una posible rampa de salida: Paredes, Braulio, Babic, Pablo Amo, Pavón, Pennant, Songo´o, Obradovic y Goni, De ellos, el club pudo buscar un acomodo a Pavón, Pennant, Pablo Amo y Goni y despidió a a Babic y Songo´o. Mientras, en San Leonardo el 16 de julio, al empezar el stage, solo estaban tres de los ocho fichajes del verano: Doblas, Marco Pérez y Leo Franco. Después, ya en agosto, no arribó tampoco un 9 y llegaron Sinama, Pinter y Bertolo y, una vez empezada la temporada, lo hicieron Boutahar y Lanzaro.
