El Código Penal castiga el abuso sexual con condenas de uno a tres años de cárcel o multas de 18 a 24 meses, lo que supone una horquilla teórica de 648 a 216.720 euros, aunque en la práctica la sanción no suele pasar de 8.000. Comete este delito quien perpetra "actos que atenten contra la libertad o indemnidad sexual de otra persona" sin utilizar para ello "violencia o intimidación" y "sin que medie consentimiento de la víctima".

Esa misma ley asigna penas de hasta cinco años de prisión a quien utilice violencia o intimidación al atentar contra la libertad sexual de otra persona, conducta tipificada como agresión sexual.

Braulio Nóbrega fue detenido como presunto autor del primero de esos delitos. Los reos de esta infracción eluden por lo general el ingreso en prisión preventiva si carecen de antecedentes --como es el caso-- ya que, en la práctica, sobre los delincuentes primarios no suelen recaer penas superiores a los dos años de cárcel --eludibles-- y figura la multa como sanción alternativa.

Las diligencias recayeron ayer en el juzgado de Instrucción número 10, que puede optar entre tramitar la causa o remitirla al 8, que estaba de guardia el día de autos.