El ciclista checo Roman Kreuziger (Tinkoff Saxo), tras conocer el expediente disciplinario abierto por la Unión Ciclista Internacional (UCI) en el que se le acusa de violar las reglas antidopaje, comentó que su pasaporte biológico no tiene anomalías.

Kreuziger afirma en su nota de prensa: "Tengo que decir que el 28.06.2013 recibí una notificación de la (UCI) en la que los datos en el pasaporte biológico analizados entre el 27 de noviembre del 2007 y el 9 abril del 2013, según la Fundación Ciclismo Antidopaje (CAFD), sus expertos indican anomalías en los años 2011 y 2012".

"Tras recibir una primera notificación sobre el asunto los datos de mi pasaporte biológico fueron analizados por dos expertos en la materia y, en septiembre y octubre del pasado año, llegaron a la conclusión de que los valores estaban bien definidos y precisos sin indicios de utilizar sustancias dopantes", precisó Kreuziger en su comunicado.

"Contraté a un tercer experto en la materia y ratificó a sus colegas diciendo que los datos del pasaporte biológico eran normales y no había motivos para sospechar del uso de sustancias o métodos dopantes", añadió.

"Mi equipo, el Tinkoff Saxo, en todo momento ha estado informado de lo que estaba sucediendo y les informé que no había ingerido sustancias prohibidas. Estoy a su entera disposición y dispuesto a cumplir cualquier decisión que adopten", agregó en su nota Kreuziger.