El Plan General para el Equipamiento Comercial de Aragón, aprobado en mayo del pasado año, establece una serie de límites y salvaguardas y fija algunas normas especiales para el sector, con el fin de impulsar su eficiencia y competitividad.

En el decreto se establece que la determinación de gran superficie se hará en función de la población del municipio (oscilan entre los 600 metros para poblaciones de menos de 20.000 habitantes a los 2.000 de Zaragoza). El plan recoge una moratoria de cuatro años para abrir grandes superficies en Zaragoza y comarca. Sí estará permitido si es una instalación urbana y de proximidad y con el consentimiento de los comerciantes de la zona.

Se limita la validez de licencias comerciales a dos años y se agilizan los trámites en las zonas de Aragón con menos oferta.