El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, admitió hoy sentir preocupación por el cierre de algunas empresas en Aragón, como es el caso de Siemens en Zaragoza, aunque destacó que esta Comunidad Autónoma tiene una economía que le permite crear más empleo del que destruye.

Así lo indicó Caldera en una conferencia de prensa en la capital aragonesa, antes de participar en un acto político con motivo del inicio de la campaña explicativa de la acción del gobierno de España en el periodo 2004-2008, en referencia al cierre de la planta que la multinacional alemana Siemens tiene en Zaragoza y que supondrá la pérdida de más de 300 puestos de trabajo. "Siempre son preocupantes las crisis de una empresa", reconoció el ministro, aunque no obstante insistió en que "globalmente la economía aragonesa crea más empleo del que destruye" y es capaz de absorber esos puestos que se pierden, algo que a su juicio queda demostrado en que "este año va a seguir bajando la tasa de paro en Aragón y va a continuar el incremento del empleo".

Sobre el caso concreto de Siemens, Caldera indicó que "parece que hay buenas perspectivas" y "el Gobierno de la nación apoyará al autónomo", aunque hizo hincapié en que es necesario garantizar que "esos puestos tengan recolocación", porque "ese es el camino, si alguien pierde su empleo hay que poner todos los medios para que encuentre otro". "Aragón está en pleno empleo", sentenció Caldera, quien afirmó que "siempre se destruye empleo porque hay empresas que no funcionan" pero lo que hay que conseguir es que esos puestos de trabajo se reabsorban de forma rápida en otras actividades.