La prensa británica da por cerrado el acuerdo entre el Royal Bank of Scotland (RBS) y el Santander por el que la entidad española comprará la red de oficinas del banco escocés. Aunque la cifra definitiva todavía no se ha publicado se señala que su precio se situará por debajo de los 2.000 millones de libras, en los que se habían valorado estas sucursales. El importe, al cambio, será de 2.410 millones de euros.

Tal y como ya adelantó el consejero delegado del Santander, Alfredo Sáez, en la presentación de los resultados hace una semana, el banco confía en cerrar este mes una operación que se ha prolongado durante más de tres meses. Las 318 oficinas del RBS a la venta, formaban parte de la red de su filial Williams & Glyn. Bruselas le obligó a deshacerse de ellas para autorizar el plan de ayudas públicas que ha recibido el banco escocés, participado mayoritariamente por capital público y en pleno proceso de reestructuración tras la crisis.