El consistorio de Alloza espera poder reactivar su fábrica de Gres para impulsar la actividad y el empleo en la zona. Así lo aseguró ayer su alcalde, Miguel Ángel Aranda, durante la ronda de visitas del Gobierno de Aragón a los municipios mineros de la provincia de Teruel. Aranda expuso su situación, necesidades y potencialidades para promover con las ayudas a la minería inversiones alternativas al declive del carbón, que fundamentalmente pasarían por la revitalización de la fábrica de gres de la localidad.

Esta fábrica, que acusó la crisis económica general de los últimos años, se encuentra actualmente a bajo rendimiento con sólo dos empleados, si bien en momentos de máxima producción podría aumentar su plantilla hasta unos 30 trabajadores. Tras el parón de la crisis, la ventaja respecto a otros proyectos es que esta empresa ya está instalada y en funcionamiento, y su recuperación podría ser el motor de la localidad.

En este sentido, se ha puesto de manifiesto durante el encuentro que, además de trabajar para atraer posibles inversiones a los pueblos mineros de Teruel, Arex también analizará y activará en su caso las posibilidades de internacionalización de las empresas, entre ellas la citada planta.