El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó esta semana una resolución que amplía la protección de los niños en los conflictos armados, al reconocer como lugares seguros las escuelas y hospitales, por lo que quienes los ataquen tendrán que asumir su responsabilidad ante la Justicia. "Las promesas de esta resolución son reales. En mis visitas a zonas de conflicto he visto la devastación en escuelas totalmente destruidas, bombardeadas o quemadas", dijo la representante especial de la ONU para los Niños y los Conflictos Armados, Radhika Coomaraswamy. Ban Ki-moon señaló que este es un paso decisivo.