En un ejercicio de transparencia, la Federación Aragonesa de Solidaridad (FAS) ha querido poner a disposición de la ciudadanía los datos sobre el impacto del trabajo de las oenegés de desarrollo en el año 2020, tanto en Aragón como en el sur global. Con el apoyo del Gobierno de Aragón y los datos proporcionados por 55 entidades ha elaborado el Informe del sector de la cooperación aragonesa. Una sociedad comprometida con la solidaridad.
Juntas, estas organizaciones tuvieron ingresos por más de 14,5 millones de euros, el 41% de fuentes privadas y el 48% de administraciones aragonesas. Su principal estrategia de trabajo en Aragón estuvo dirigida a promover la educación para el desarrollo y la ciudadanía global. Dentro de esta línea, 25 oenegés realizaron 63 proyectos que superaron en conjunto el millón de euros y beneficiaron a 160.000 aragoneses.
En el exterior, los proyectos de cooperación al desarrollo fueron su principal actividad, realizada por el 71% de las organizaciones participantes en el informe. En total se ejecutaron 258 acciones en 49 países, que impactaron de forma directa en la vida de 1,7 millones de personas.
La región a la que más proyectos se destinaron fue Latinoamérica, donde se implementaron 114 proyectos en trece países. Estos procesos beneficiaron a más de 420.000 personas. En esta región se ejecutó el 50% del importe total destinado a cooperación. Las otras regiones receptoras de ayudas fueron, en orden descendente, África subsahariana, el Magreb, Oriente Medio y Asia.
Los principales ejes de trabajo en el extranjero fueron la reducción de las desigualdades sociales, el acceso a la salud y la educación, la promoción de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y el fortalecimiento de las estructuras democráticas y de la participación de los pueblos.
Las oenegés aragonesas tejieron una importante relación con organizaciones locales en los países en donde operan. Durante el año 2020 trabajaron de forma conjunta con 207 contrapartes. Esta relación permitió crear estrategias que respondiesen a las necesidades más sentidas y conocer de forma más profunda el contexto en el que actúan.
El voluntariado es la principal base social que sostiene la labor de estas entidades. De hecho, el 40% ni siquiera cuenta con personal contratado. Del resto, la mayoría no supera los dos empleados, y solo el 68% del personal trabaja a jornada completa. A pesar de que 39 oenegés ejecutaron proyectos en el exterior, solo seis cuentan con personal contratado en otros países.
El 91% de las agrupaciones consultadas recibe el apoyo de voluntarios. Durante el 2020, más de 1.500 personas colaboraron con ellas de forma altruista. Solo el 16% (9 entidades) contó con voluntariado internacional (32 personas), una cifra muy baja debido a las restricciones impuestas por la emergencia del covid-19.
