El presidente del PP, Mariano Rajoy, prefiere no comentar en público --al menos por el momento-- la decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) de intentar llevar a Francisco Camps a juicio por el caso de los trajes. Ayer se negó a responder las preguntas que al respecto querían hacerle los periodistas. Por segundo día consecutivo, prefirió callar y ganar tiempo para tratar de alcanzar un acuerdo con el dirigente valenciano sobre la manera de gestionar este asunto, habida cuenta de que el juicio con jurado podría coincidir con la campaña para las próximas elecciones generales.

ACUERDO CON LA FISCALÍA El entorno de Mariano Rajoy quiere que Francisco Camps pacte con la fiscalía y la acusación particular para reconocer la comisión de un delito de cohecho impropio y, a cambio de pagar una multa, se libre definitivamente del banquillo y facilite el camino al candidato popular a la Moncloa.

El presidente de la Generalitat valenciana todavía no ha tomado una decisión definitiva, pero su equipo ya admite que se está estudiando la posibilidad de eludir el juicio.

Así, cuando ayer se le preguntó por un posible acuerdo con la fiscalía para evitar el banquillo, el secretario general del Partido Popular valenciano (PPCV), Antonio Clemente, apuntó que el asunto se resolverá "en un momento determinado". "Es el presidente quien tiene que decidirlo y respetaremos cualquier decisión que él tome", agregó.

Pero, por el momento, Francisco Camps también se mantiene en silencio, a pesar de que su portavoz, Dolores Johnson, aseguró ayer que el líder autonómico recuperará su agenda de actos en unos días. Tampoco la secretaria general de los conservadores, María Dolores de Cospedal, quiso hacer ninguna declaración sobre el caso de los trajes, aunque recientemente concedió una entrevista a Veo TV en la que reconoció que empezar la campaña electoral con Camps en el banquillo "no es la mejor idea".

DIMISIÓN Los socialistas, por su parte, no pierden ocasión de meter el dedo en la llaga que ha creado Camps en el PP y, ayer mismo, exigieron su dimisión por boca de su directora de campaña, Elena Valenciano. "Hay muchísimos militantes y votantes del PP que están esperando que Mariano Rajoy diga algo de lo que está sucediendo con Francisco Camps --dijo Valenciano--. Alguna vez Rajoy tendrá que afrontar alguna de las responsabilidades que tiene. Y una de ellas es hacer que Camps dimita".

No obstante, desde el entorno de Mariano Rajoy se apunta que el presidente de los populares sigue "confiando" en Francisco Camps y que no piensa tomar decisiones precipitadas. "Hay tiempo de sobra para hacer lo que haya que hacer", subrayan fuentes del partido. De momento, el líder del Partido Popular está a la espera de conocer el análisis público que el propio Francisco Camps hace del auto dictado por el instructor del caso de los trajes, el juez José Flors.