Nacido en 1957 en Nayaf, en el sur de Irak, Alí Ardashir Lariyani es hijo del gran ayatolá Haj Mirza Hazme Amoli, uno de los más destacados sabios del chiísmo. Licenciado en matemáticas y periodismo y doctor en filosofía occidental, participó en el movimiento de oposición al sah Reza Pahlevi. Tras su derrocamiento, Lariyani fue nombrado director de la radiotelevisión iraní.

Su talante conservador y su cercanía a Alí Jamenei, líder supremo de Irán, le llevó al cargo de ministro de Orientación Islámica, primero, y después a ser nombrado jefe del Estado mayor de los Guardianes de la Revolución, antes de ser designado como Secretario del Consejo Supremo de la Seguridad Nacional.

Desde ese cargo, Lariyani ha sido un negociador hábil, aunque firme ante las demandas occidentales. A su llegada al puesto, criticó el espíritu conciliador de su antecesor. En su opinión, Irán no debía desprenderse de la "perla" tecnológica que suponía poder enriquecer uranio a cambio del "bombón" que le ofrecía la UE. Aunque su divisa era que "hacer la mínima concesión", se mostraba abierto al diálogo.