El oncólogo Tabaré Vázquez, de 75 años, obtuvo el 47% de los votos en la primera vuelta de las presidenciales de Uruguay con la candidatura Frente Amplio (FA). Luis Lacalle Pou, su competidor por el Partido Nacional (PN), llegó al 31% de las adhesiones. Pedro Bordaberry, del Partido Colorado, apenas cosechó el 13%.

Y aunque ya proclamó que apoyará a Lacalle Pou, la suma de ambos sigue siendo inferior al sorprendente resultado obtenido por el FA, cerca además de lograr otra vez la mayoría parlamentaria.

Las encuestas previas a la contienda auguraban otra cosa: una segunda vuelta muy reñida y la fuerte posibilidad de que concluyera el ciclo de gobiernos de izquierdas. Los sondeos de pie de urna refutaron esos pronósticos. Los números oficiales profundizaron la corrección.

Lacalle Pou no lo dio todo por perdido. "Está intacta la posibilidad de poder ser Gobierno", dijo, y le pidió a Vázquez "una discusión civilizada porque le va a hacer bien al país". En el FA llamaron a la prudencia. "Hay que afinar el lápiz para asegurar resultado", dijo la senadora Lucía Topolansky, esposa de José Mujica. El 3% de los votos que faltan deben salir de las agrupaciones menores y los que votaron en blanco.

El diario uruguayo El País ha reconocido que Tabaré, salvo un desastre, será el segundo presidente que repite el cargo en la era posdictadura. Solo Julio María Sanguinetti (1985-90 y 1995-2000) lo ha logrado antes.