La operación 'London Bridge is down' (El Puente de Londres ha caído'), el protocolo preparado para el día del fallecimiento de Isabel II, es sobradamente conocido. Sin embargo, existe otro protocolo secreto: la 'Operación Unicornio', el plan diseñado por si la monarca muere estando en Escocia. Justo lo que ha sucedido.

Isabel II se encontraba en el castillo de Balmoral, ubicado en Aberdeen, en las Highlands escocesas, bajo supervisión médica debido a su delicado estado de salud. Un comunicado del Palacio de Buckingham ha informado este jueves de que la salud de la reina había empeorado desde el martes, cuando recibió la visita del exprimer ministro Boris Johnson, pero que, se encontraba "cómoda".

Una vez confirmada la defunción de Isabel II en su residencia de verano de Escocia, entra en acción la denominada 'Operación Unicornio'. Antes de dar a conocer la noticia al público, se suspenden las sesiones parlamentarias en Westminster, el Parlamento de Escocia, el Senedd de Gales y la Asamblea de Irlanda del Norte para preparar el funeral de Estado.

Tras la suspensión parlamentaria, el féretro de la reina será trasladado desde Aberdeen al Palacio de Holyrood, la sede del Parlamento escocés en Edimburgo, en un tren especial protegido por las Fuerzas Armadas y los cuerpos de seguridad.

Una vez allí, al día siguiente, se celebrará una misa solemne en la catedral de Saint Giles, situada al igual que el Palacio de Holyrood en la Royal Mile de la capital de Escocia. En la catedral, los principales líderes cívicos, dignatarios y ciudadanos de Escocia tendrán la oportunidad de presentar sus respetos y firmar un libro de condolencias.

A continuación, el féretro será llevado hasta Londres en el Royal Train, partiendo desde la estación de Waverley y recorriendo la línea principal de la costa este hasta llegar a la metrópoli londinense. Una vez que el ataúd llegase a Londres, la 'Operación Unicornio se dará por concluida para dar paso a la operación 'London Bridge is down'.