Monarquía británica

Camila figura como reina en la invitación de la coronación de Carlos III

Buckingham Palace hace pública la convocatoria que será enviada a los dos mil invitados que asistirán a la ceremonia

Carlos III y Camila presiden la misa de Jueves Santo

Agencia ATLAS | Foto: EP

A. Niubó

La invitación de la coronación de Carlos III en la abadía de Westminster el próximo 6 de mayo que ha hecho pública la Casa Real se refiere a Camila Parker Bowles como 'Reina Camila'. Este será el trato que pasará a recibir a partir de entonces. Culminará de esta forma un sorprendente viaje de cinco décadas en la que ha pasado de ser la amante del príncipe Carlos y la persona más odiada por los británicos (tras la muerte de Diana de Gales) a ser reconocida y aceptada como su reina.

Camila procede de una familia aristocrática británica. Su padre era un exalto cargo del ejército reconvertido en hombre de negocios y su madre era la hija del tercer barón de Ashcombe. Su bisabuela materna era conocida porque fue la amante del rey Eduardo VII. Carlos y Camila, que ahora tienen 76 años, se conocieron en 1971, cuando tenían 24, y empezaron una historia de amor que quedó interrumpida de forma abrupta dos años más tarde, en 1973, cuando el príncipe Carlos se marchó a servir a la Marina. Camila se casó ese mismo año con un oficial del Ejército.

En 1980, el entonces príncipe se casó con Diana Spencer, que pasó a ser la persona más querida por británicos. Pero Carlos y Camila se siguieron viendo mientras ambos estaban casados, un secreto a voces que confirmó la princesa Diana en la famosa entrevista para la BBC de 1995, tras separarse de Carlos, en la que confirmó que el suyo siempre fue matrimonio de tres. Se culpó a Camila de la separación y de la tristeza de Diana y se convirtió en una de las personas de la realeza que más rechazo provocaban entre la gente.

No ayudó a su popularidad la transcripción de una conversación subida de tono entre Carlos y Camila interceptada por una radioaficionado y vendida a la prensa sensacionalista en la que Carlos le decía que le gustaría ser su tampón para estar dentro de ella. El rechazo se incrementó tras la muerte de Diana, en 1998. Camila ya se había trasladado a vivir a la residencia oficial del príncipe Carlos en Londres, en Clarence House. Había empezado a acompañar de forma muy discreta al príncipe Carlos a eventos muy ocasionales.

La primera aparición pública de la pareja no se produjo hasta 1999. En 2002 la reina Isabel II la invitó a su jubileo de oro. Por primera vez se la pudo ver detrás de la monarca. En 2005 Carlos y Camila se casaron por lo civil en el Ayuntamiento de Windsor (este domingo la pareja celebra el 18 aniversario de boda) con un convite posterior organizado por la reina en el castillo. Tras la boda se convirtió en Duquesa de Cornualles y en princesa consorte por ser Carlos el primero en la línea de sucesión. Su popularidad entre la población seguía siendo muy baja, igual que la de Carlos. Y es que los británicos no les perdonaban su engaño a Diana.

En febrero de 2022, la reina expresó públicamente su deseo de que cuando llegara el momento y Carlos se convirtiera en rey, Camila pasara a ser tratada como reina. Este momento llegará el próximo de 6 mayo como se ha podido ver en la invitación a la coronación que ha sido publicada y que será enviada a los 2.000 invitados que asistirán. Y a partir de esa fecha se actualizará la web real para recibir oficialmente el trato de reina. Buckingham Palace también ha anunciado que el príncipe Jorge, el nieto de Carlos III, y tres de los nietos de Camila estarán entre los ocho pajes de honor que acompañarán a Carlos III en su coronación