De nuevo espectacular resultó el belén que brindó y regaló Ángel Vidal en la Navidad 2017. Contando con la importantísima colaboración de Martín Andrés, de nuevo la Sala de Exposiciones de la Bodega del Canal de Gallur ha adquirido la vida que por estas fechas dotan ambos al recinto y al municpio. Porque el belén de Ángel es un importante reclamo de visitas para numerosas personas que realizan rutas belenísticas al ser uno de los más extensos, bien proporcionados y nutridos en cuanto a un contenido que anualmente cambia por completo su idiosincrasia.

En este año, Vidal ha querido representar un Belén ‘norteño’, como él lo denomina o ‘pirenaico’, diseñado con generosa paciencia, buenas dosis de trabajo e innumerables horas invertidas. Y es que las casas que se pueden observar en el belén, han sido todas diseñadas y construidas por Ángel Vidal.

Y, además, algunas de ellas se han puesto a la venta de manera que si alguno de los visitantes está interesado en su adquisición solo debe de ponerse en contacto con su creador.

Ángel es el último belenista de la familia y ya no dispone de espacio suficiente en su casa para albergar las numerosas y voluminosas piezas que ha ido construyendo y acumulando con el paso del tiempo. Su venta no le da pena, porque indica «seguro que las van a saber apreciar y colocar en lugares estables por tiempo indefinido». T