La bronca por el coste del Seminario alcanzó ayer su punto máximo y, de nuevo, fue por culpa de los desorbitantes precios de la rehabilitación. En esta ocasión el detonante ha sido los 500.527 euros invertidos en adecuar el torreón norte (conocido por su inmenso rosetón de piedra) como futuro despacho del alcalde. Unas dependencias que Juan Alberto Belloch no tiene previsto utilizar, al menos, ni este año ni el próximo puesto que ha dado orden de no amueblarlo, al menos, en un año. Esta cuantía fue utilizada ayer como arma arrojadiza entre el PP y el PSOE, en una bronca sin precedentes entre los dos partidos que podría acabar en los tribunales. Los socialistas amenazaron ayer con presentar una demanda civil contra Domingo Buesa si no rectificaba y retiraba las acusaciones de despilfarro lanzadas contra el alcalde Belloch, pero el PP dejó claro que no va a dar marcha atrás y describió el gasto en el torreón con dos palabras: "Despilfarro injustificable".

Todo comenzó por la mañana, cuando el PP compareció para denunciar que el proyecto de obras complementarias del Seminario aprobado por el Gobierno PSOE-PAR la semana pasada reservaba 500.527 euros (83 millones de las antiguas pesetas) al acondicionamiento del torreón para instalar allí el área de Alcaldía. La torre se estructuraba en dos plantas: una para las secretarias (con aseo y ducha propia) y otra para el despacho de Juan Alberto Belloch propiamente dicho.

La denuncia vino acompañada de todo tipo de detalles acerca de los materiales empleados: mármol para los suelos, revestimiento de cerezo para las paredes, madera africana de elondo para las escaleras, 23.780 euros para tecnología, dos platos de ducha... "Es un piso de lujo que va a costar a los zaragozanos 83 millones de las antiguas pesetas", puntualizó el portavoz del PP, Domingo Buesa.

Estas acusaciones de despilfarro y de estar dilapidando las arcas municipales en gastos innecesarios cayeron como un jarro de agua helada en Alcaldía. Sin embargo, no fue el alcalde quien salió a dar la cara, sino su primer teniente de alcalde, Fernando Gimeno, quien no tardó ni veinte minutos en organizar una comparecencia para desmentir al PP y lanzarle una amenaza: "O rectifica o el grupo municipal del PSOE presentará una demanda civil contra Domingo Buesa reclamándole una indemnización por daños y perjuicios, porque sus declaraciones dan una mala imagen de la ciudad". (Demanda que si fructifica se pagará con dinero del grupo socialista).

Y para despejar toda sombra de dudas, Gimeno organizó por la tarde una visita abierta a los medios de comunicación para que constatasen que todos estos materiales que el PP había calificado como "de lujo" y exclusivos del despacho del alcalde son los mismos que se han empleado en el resto del edificio. Es decir, que tanto la madera de elondo como el mármol se pueden encontrar en los pasillos, en las oficinas de los funcionarios y en el recibidor del Seminario. Y así se pudo constatar ayer por la tarde en la visita.

Sin embargo, el PP no se retractó en su denuncia, sino que se reafirmó en dos ideas más. La primera, que la adecuación de la torre como despacho del alcalde responde a un nuevo capricho y a la improvisación del PSOE, puesto que en el proyecto inicial ese torreón iba a utilizarse como biblioteca administrativa (para fondos internos del ayuntamiento). Al cambiarse el uso de biblioteca a Alcaldía (en junio) es cuando ha habido que habilitar la torre, instalar dos cuartos de baño, las escaleras y la propia estructura en dos alturas en vez de una sola diáfana de 18 metros de altura.

Frente a esta acusación de improvisación, el teniente de alcalde de Economía y Hacienda, Francisco Catalá, replicó que habilitar la torre como biblioteca, en vez de como dependencias de Alcaldía, hubiese resultado mucho más caro. No dio datos para poder comparar, por lo que se desconocen. Este diario pudo saber que esa biblioteca estaba incluida y cuantificada en el precio inicial, antes de que se aprobase cualquier modificado de los que han requerido dinero extraordinario.

Y el segundo mensaje que quiso dejar claro el portavoz del PP, Domingo Buesa, fue que este "escándalo" se produce pocos días después de que el alcalde haya tenido que pedir perdón públicamente por haber dado el visto bueno a unos muebles de elevado coste (180.000 euros en una mesa para la sala de reuniones del Seminario) y dos días después de que presentase un Plan de Austeridad. "Esta obra era completamente prescindible, porque Belloch nunca aparece por la sede de Urbanismo y ya tiene un magnífico despacho en la plaza del Pilar", incidió Buesa.

No obstante, a esta observación fuentes del gobierno socialista advirtieron que nadie debe escandalizarse por esta duplicidad. "Numerosos concejales, incluidos algunos del Partido Popular, disponen de dos despachos. Uno en la plaza del Pilar y otros en las juntas de distritos que presiden. ¿Por qué no el alcalde?", plantearon.

Independientemente del coste y de si resulta pertinente o no gastar 500.527 euros para adecuar un torreón que el alcalde no tiene previsto utilizar, la jornada de ayer sirvió para que el equipo de gobierno PSOE-PAR se decidiera a enseñar las dependencias. Belloch, que estaba en la plaza del Pilar cuando Buesa verbalizó sus acusaciones, no salió a dar la cara. Por la tarde tres tenientes de alcalde (Fernando Gimeno, Francisco Catalá y Carlos Pérez Anadón) y la concejala de Medio Ambiente, Lola Campos, acompañados por el Coordinador del Área de Urbanismo, Carmelo Bosque, recorrieron durante más de una hora las nuevas dependencias municipales.

"El equipo de gobierno se siente muy orgulloso de la rehabilitación del torreón", sentenció Gimeno. "Esta ciudad se merece un centro administrativo, como mínimo, como este", añadió. Y contratacó: "Esta ciudad no merece grupos políticos que emponzoñen" la vida pública. Los tres tenientes de alcalde defendieron su gestión en esta polémica rehabilitación. La retirada o no de la mesa del salón de plenos, valorada en 180.000 euros, todavía está pendiente del informe pericial del Colegio de Arquitectos. Entre tanto, el coste de esta polémica rehabilitación supera ya los 71 millones de euros, 21 millones más de los que se presupuestaron inicialmente.