Aunque la segunda fase de las obras va desde Gran Vía hasta parque Goya, lo cierto es que todos los ojos del área de Movilidad estarán puestos desde hoy en la plaza Paraíso y en paseo Independencia. Allí es donde se espera que se produzcan los mayores colapsos y, por este motivo, la zona que es mejor evitar. La plaza Paraíso pasará de tener una capacidad para 80.000 vehículos diarios a unos 25.000.

No obstante, los que aún así decidan pasar por este punto se encontrarán con un carril en lugar de los tres que hasta ayer tenía la plaza. Así que si los conductores no optan por vías alternativas, el colapso está asegurado. Las recomendaciones del ayuntamiento se basan desde hace semanas en el uso de los cinturones como solución principal a los atascos.

A la hora de ir de una margen a otra, lo mejor es evitar a toda costa el puente de Santiago, que mantendrá solamente un carril para cada sentido y tendrá que absorber todo el tráfico de Echegaray y de barrios como el Actur y el Arrabal. Habrá que hacer uso del puente de Hierro y especialmente, del puente del Tercer Milenio.

VIANDANTES Los viandantes son los que menos sufrirán las obras, porque el proyecto de construcción no afecta a las aceras ni tampoco a los pasos de peatones. Estos tan solo modificarán su ubicación justo cuando haya que construir los raíles en ese punto en concreto.

A todos estos cortes ya programados hay que sumar dos afecciones importantes. La calle Canfranc está cerrada desde la pasada semana por las obras de remodelación de la red de suministro. Una obra de gran calado que prohibirá la circulación en esta vía durante los próximos diez meses. Además, la calle Galo Ponte se corta también desde hoy al tráfico rodado por obras en la Audiencia Nacional. Esto provocará afecciones principalmente a los residentes en las calles del Casco.