La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, afirmó ayer que sufrió «acoso» durante una reunión con «personas del mundo judicial» y aseguró que «hay que dar visibilidad a todos los tipos de acoso» que sufren las mujeres.

Así lo manifestó en un acto en Madrid titulado «Mujeres cambiando el país» en el Teatro La Latina, al que también asistió la portavoz del Ayuntamiento madrileño, Rita Maestre, la actriz Rosario Pardo, las periodistas Rosa María Artal y Cristina Fallarás, y la gimnasta María Martín.

La alcaldesa de Barcelona relató que, durante un encuentro con «personas del mundo judicial, con mucha formación y de ámbito progresista», dos hombres le preguntaron «si tenía novio» y le propusieron relaciones sexuales.

«Con alcohol y haciéndose los simpáticos, me dijeron que estaba muy buena y que podíamos hacer cosas...», relató. Ada Colau justificó que hiciera esas declaraciones por que considera que si a ella le puede suceder como alcaldesa, «pueden suceder en todos los ámbitos de la sociedad».

Recordó las declaraciones por parte del escritor Félix de Azúa, quien afirmó que Colau «debería estar sirviendo en un puesto de pescado», y ha destacado que «duelen más» los acosos «invisibles que los visibles».

Colau comentó además los tocamientos a una familiar suya el pasado fin de semana en el festival de música electrónica de su ciudad, el Sónar, y después se puso a sí misma como ejemplo.

Colau subrayó que es una «anomalía» que ella sea «la primera alcaldesa de Barcelona», una ciudad tradicionalmente progresista. «Soy la primera alcaldesa feminista de un gobierno feminista», proclamó. Además, destacó la importancia de la visibilización de las mujeres en puestos de poder y contó su anécdota de las niñas que la paran por la calle y le dicen que quieren ser alcaldesas. H