El Gobierno aragonés ha vuelto hoy a expresar su preocupación por la inminente suelta de dos osas en la vertiente francesa del Pirineo occidental, en el marco del programa llevado a cabo en el país galo para la recuperación de esta especie.

Según informa el Ejecutivo autónomo, la directora general de Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Pilar Gómez, ha trasladado a las autoridades francesas la oposición aragonesa al programa de reintroducción del oso en la zona occidental del Pirineo.

A través de una videoconferencia, señalan estas fuentes, la directora general ha expuesto el malestar del Ejecutivo regional por no informar de la suelta así como la preocupación por las consecuencias que podría acarrear al territorio aragonés, donde la presencia del oso suscita las críticas de los ganaderos.

Desde la reunión celebrada el pasado mes junio con la prefectura francesa, no se había vuelto a mantener contacto alguno sobre el programa de reintroducción del oso.

Ante la solicitud de información realizada desde el Ministerio para la Transición Ecológica y de las comunidades autónomas de Navarra y Aragón, hoy se ha mantenido una teleconferencia en la que han intervenido responsables de estas administraciones así como de la parte francesa.

Las fuentes citadas señalan que el representante francés ha comunicado que la decisión es "irrevocable" y que la introducción de las dos osas se realizará a principios de este mes de octubre en la zona más occidental del Pirineo, frontera con Navarra y Aragón.

"Desde Aragón hemos trasladado nuestra preocupación y nuestra contrariedad por la falta de información sobre este proyecto francés y, especialmente, por la falta de conocimiento de las fechas y localización", ha explicado Pilar Gómez, quien ha asegurado haberse enterado a través de los medios de comunicación.

A su juicio, "una reintroducción unilateral es insostenible", una idea que ha expuesto al representante francés para alertar de que la reintroducción de un gran carnívoro en zona fronteriza supone "su reintroducción en zonas periféricas que no han sido ni consultadas, ni han tenido oportunidad de manifestar su opinión al respecto".

Gómez ha aprovechado para manifestar el malestar que los ganaderos y habitantes del Pirineo aragonés han transmitido al Gobierno regional.

Una reintroducción que se produce, además, en un momento en el que el colectivo ha solicitado apoyo a la ganadería extensiva en zonas de alta montaña como forma de lucha contra la despoblación en el medio rural.

"La situación creada hasta el momento, sin ningún tipo de coordinación ni consenso, no responde a todos los esfuerzos que se están haciendo de colaboración y cooperación en proyectos transfronterizos en la zona pirenaica entre ambos países, y entre las regiones limítrofes", ha dicho Gómez.