La consejera de Sanidad de Aragón, Luisa María Noeno, ha propuesto a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, el endurecimiento de la normativa de prevención y control de la legionela, a raíz del brote del hospital Clínico, que ayer se cobró su quinta víctima. De los 37 casos diagnosticados en junio, 22 guardan relación con el brote del centro sanitario (ayer se relacionó a otros dos afectados de Calatayud). De éstos, cinco han fallecido, cinco han sido dados de alta y otros doce permanecen ingresados, tres en la UCI.

Noeno tuvo conocimiento de esta última muerte --un hombre de 78 años, ingresado en la UCI por una grave patología pulmonar-- al inicio de su comparecencia ante la comisión de Sanidad de las Cortes, a la que acudió para explicar las medidas aplicadas para el control de esta bacteria, que también se ha detectado en concentraciones elevadas en otras cuatro torres de las 21 inspeccionadas.

"Ayer mismo le pedí a la ministra de Sanidad, con la que he hablado ya varias veces estos días, la conveniencia de que el Ministerio de Industria refuerce la actual normativa para el control de esta patología emergente", afirmó la consejera.

Asimismo, Noeno aceptó indirectamente la posibilidad de sustitución de estas torres de refrigeración. "El endurecimiento de la normativa serviría hasta que aparecieran en el mercado otro tipo de aparatos, capaces de sustituir realmente a las actuales torres de refrigeración. Pero ahora no los hay", lamentó.

Por su parte, el director general de Salud Pública, Luis Gómez, avaló la petición a la ministra. "Conforme crece el parque de torres de refrigeración, aumenta la infección por legionela asociada al confort y al bienestar".

CONTROL A LAS EMPRESAS La consejera reconoció también que se van a revisar los protocolos de actuación que han aplicado las empresas concesionarias del mantenimiento de las torres que han resultado contaminadas por el momento: las dos del Clínico, la de Telefónica en la calle Bretón, y tres de la Facultad de Medicina. A pesar de todo, insistió en que en el caso del Clínico, "la empresa ha cumplido los protocolos que marca la normativa", y en el resto de los casos está pendiente de recibir la información.

Ambos representantes de la Administración sanitaria insistieron en que "no existe riesgo para la población en general", y subrayaron que el principal foco infeccioso es el del hospital Clínico, debido a que en dos pacientes diagnosticados se ha detectado la misma cepa que la hallada en una de las torres de refrigeración, y que está tipada como legionela Filadelphia. Además, la consejera añadió que los hospitales son centros más propensos a que existan brotes de legionela, debido a que el perfil de personas que acuden a estas instalaciones corresponde a población con problemas de salud.

Todavía faltan algunos días para conocer si crecen o no los cultivos de las muestras tomadas en las 21 torres examinadas, ya que los análisis se efectuaron a lo largo del viernes 18 y el lunes 21, y el periodo de incubación ronda los 10 días.

Los dos nuevos casos relacionados ayer con el brote del Clínico son dos hombres, de 53 y 68 años, que ingresaron los pasados 19 y 20 de junio con síntomas compatibles con legionelosis, y que ya han sido dados de alta.

En un primer análisis el resultado fue negativo en ambos casos, por lo que se completó la información con otras pruebas, cuyos resultados se han conocido ayer y que han permitido detectar la presencia de la bacteria de la legionela. Ambos coincidieron como cuidadores de sendos familiares en el Clínico durante la primera semana de junio.

Por otra parte, los directores generales de Salud Pública del Departamento de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón, Luis Gómez, y del Ministerio de Sanidad y Consumo, Manuel Oñorbe, se reunirán hoy en Zaragoza para analizar la información disponible en la investigación epidemiológica abierta a raíz de la declaración del brote de legionelosis.