Unas 400 personas participaron este viernes en Benasque en otra cacerolada impulsada por los empresarios y trabajadores del sector de la nieve. La marcha, que discurrió por las principales calles de la localidad, reclama un compromiso firme de las autoridades con los negocios de las comarcas pirenaicas, pues temen que las restricciones de movilidad provincial aboque a la ruina a sus negocios.

Esta cacerolada llega tras el polémico escrache contra el alcalde de Jaca, Juan Manuel Ramón, de la pasada semana y tras la aprobación de un plan de ayudas específico para el sector por parte del Gobierno de Aragón. Desde el departamento de Industria esperan favorecer la contratación de un millar de parados por parte de los ayuntamientos.