Huesca La calle Canellas de Huesca se reabrió ayer al tráfico tras haber finalizado el periodo recomendado para la consolidación del firme. Los trabajos de la nueva plaza que comprende Canellas, Desengaño y Peligros consistieron en reurbanizar el firme y renovar las tuberías, que databan de los años 30, y han costado más de 300.000 euros a cargo de fondos europeos y del Gobierno de Aragón.

Para la alcaldesa Ana Alós, "la inversión en la mejora del saneamiento seguirá siendo una de nuestras prioridades, ya que es necesario continuar renovando este tipo de infraestructuras tanto en el Casco Histórico como en otros puntos de la ciudad". La actuación ha incluido la protección de los restos romanos hallados en las excavaciones. E. P.