Miguel Carcaño, el asesino confeso de la joven sevillana Marta del Castillo, se someterá este jueves al "test de la verdad" en el hospital Miguel Servet de la capital aragonesa, una prueba neurofisiológica que se le practicará por la tarde con el fin de esclarecer dónde está el cuerpo sin vida de su víctima.

Carcaño se trasladó el pasado martes desde la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) hasta el centro penitenciario de Zuera para que se le haga la prueba que registra su actividad cerebral ante determinados estímulos y a la que ha aceptado someterse de forma voluntaria. Tiene cita a las 16.00 horas y podría concluir sobre las 18.30 horas, según el grado de colaboración que demuestre.

Esta prueba, para la que el pasado martes se han hecho los ensayos previos, sin la presencia de Carcaño, permitirá orientar la búsqueda del cadáver de la joven sevillana mediante una técnica clínica que hasta ahora, en España, sólo se ha realizado el pasado 18 de diciembre en el Miguel Servet de Zaragoza a Antonio Losilla, presunto asesino de su esposa en la localidad zaragozana de Ricla.

Recuerdos almacenados

El objetivo del estudio es averiguar si Carcaño tiene recuerdos del lugar donde ocultó el cadáver de Marta del Castillo, desaparecida el 24 de enero de 2009, sobre cuyo paradero ha dado hasta siete versiones diferentes que han llevado a que las reiteradas búsquedas del cuerpo hayan sido infructuosas hasta la fecha.

Para hacerle la prueba, se le colocará un "gorro de electroencefalografía" que registrará su actividad cerebral en una máquina, mientras en un ordenador, ubicado en una habitación aislada, se proyectan fotografías y frases relacionadas con la búsqueda de los restos de la joven.

Tanto la Fiscalía como los padres de Marta del Castillo han apoyado que se realice el test de la verdad o del Potencial Evocado Cognitivo a Carcaño, una prueba que también cuenta con la pertinente autorización del titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla que investigó la muerte de la joven sevillana.