El cementerio de Torrero iniciará en breve las obras de construcción de 1.050 columbarios nuevos que, con las unidades de enterramiento disponibles, aumenta en dos años y medio su vida útil o su capacidad del «segundo gran equipamiento» del ayuntamiento. A falta de inversión para los vivos, al menos Zaragoza reacciona para los que fallecen de manera que hasta el 2021 no serían necesarias nuevas inversiones. De momento, estas obras suponen una inversión importante dentro de los 1,98 millones de euros que se han completado en este mandato. Junto a ellos, las nuevas capillas, nueve recién entregadas, que se han habilitado en el extremo sur del camposanto.

Respecto a los columbarios ya hay «3.000 unidades» en los laterales de las manzanas de nichos tradicionales que ya no pueden competir en precio con estos nuevos habitáculos. Los nuevos se levantarán con 50 y 70 unidades aproximadamente en cada bloque adherido al lateral de las manzanas y con un formato más moderno y resistente que el hormigón empleado en las primeras construcciones para alojar las cenizas. Los actuales son ahora de acero corten en el exterior, de menor tamaño (de 35 centímetros de altura y longitud, antes eran de 60). Y a menor precio para las familias, solo a 240 euros la unidad. Todo por 293.000 euros.

La incineración está en alza y, al parecer, también hay demanda para los panteones. De momento se han entregado nueve de 286 metros cuadrados, valorados en 213.000 euros, y dentro de una concesión con capacidad para hacer 250. Son grandes habitáculos con capacidad para diez ataudes y otros tantos columbarios. «El cementerio tiene vitalidad y reservas para los próximos años», explicó el responsable de Urbanismo, Pablo Muñoz, quien también recopiló algunas de las mejoras introducidas en el funcionamiento de este «equipamiento vivo», como es la puesta en marcha de un Centro de Interpretación del Arte Funerario en las oficinas, con unas obras valoradas en 180.000 euros. Como destacó la concejala de Empleo, Arantza Gracia, se ha ejecutado con la escuela taller Ricardo Magdalena en dos pabellones distintos situados en el acceso a la parte vieja, obras valoradas en 554.000 y 761.000 euros, respectivamente. Así se completa una inversión de casi dos millones de euros.