El embalse de Arguis, uno de los escenarios favoritos de los altoaragoneses para la pesca de la trucha común, inició la nueva temporada el pasado 11 de abril. Y ello pese a que todavía no se ha resuelto el problema que representa la repoblación con trucha común, la única especie admitida en este pantano.

De forma que los pescadores tendrán que adaptarse a las condiciones de esta temporada, según informó ayer Radio Huesca, que explicó que las dos modalidades toleradas son la extractiva y la de captura y suelta. De hecho, los carnés que se han puesto a la venta son de estos dos tipos, por unos precios que oscilan entre los tres y los cinco euros.

Los permisos se conseguirán en el bar La Foz, situado a la orilla del embalse, en la antigua carretera del puerto de Monrepós, y también online en la página web de la Federación Aragonesa de Pesca.

Cabe recordar que, según una reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), la trucha arco iris, la carpa y el black-bass pasan a tener la consideración de especies pescables en la modalidad de captura y suelta, que no excluye la extractiva.

El embalse de Arguis, al pie del puerto de Monrepós, registra una gran afluencia de aficionados a la pesca. En particular, es muy apreciada la presa, situada junto a la N-330, pues está considerada un buen sitio para la captura.