Una manifestación no comunicada a favor de la libertad para el rapero Pablo Hasél, encarcelado por cometer varios delitos, entre ellos enaltecimiento del terrorismo, ha recorrido esta tarde las calles del centro de Zaragoza en medio de un fuerte cordón policial.

En la marcha, que ha partido del campus universitario, participaban varios centenares de personas, en torno al medio millar, en su mayoría jóvenes que ondean banderas anarquistas y gritan consignas contra el Estado, los Borbones, la Policía y la Administración Justicia. Gritos de "¡Fascistas!" y "¡Corruptos!" alternan con los de "¡Amnistía, libertad!".

Varias furgonetas de policías antidisturbios siguen y preceden a la manifestación, que es vigilada desde el aire por un helicóptero. Una pancarta en la que se pide libertad para Pablo Hasél abre la marcha, que ha salido sobre las 19.30 del estanque del campus. En otros carteles portados por los participantes puede leerse La Transición fue una farsa.

La marcha ha terminado en la plaza de Utrillas, donde se ha disuelto pacíficamente, según indicaron fuentes policiales. Según cálculos de la Delegación del Gobierno, han participado unas 250 personas.

Apología del terrorismo

La manifestación ha sido convocada después de que la Audiencia de Lérida, el pasado 19 de febrero, confirmaran una nueva condena para el rapero, que ha ingresado en la cárcel por apología del terrorismo.

Este asunto, que le ha valido dos años y medio de condena, está relacionado con las amenazas que vertió contra un testigo de un juicio celebrado contra un guardia urbano de la ciudad ilerdense.

Esta condena en segunda instancia ratificaba la que ya emitió el Juzgado Penal número 3 de Lérida en marzo del 2020 y es recurrible. Los delitos acumulados son por obstrucción a la justicia, amenazas y un tercero de maltrato de obra.

La sentencia recoge en sus fundamentos de hecho que el 16 de octubre del 2017 Pablo Hasél escribió Twitter: «La Guardia Urbana de Lérida compró a este testigo falso para declarar contra un compañero al que dieron una brutal paliza. Han sido absueltos».

Amenazas a un testigo

Amenazas a un testigo Al tuit le acompañaba una fotografía del testigo «como represalia por el testimonio» que expresó en la vista oral. En la misma se juzgó a un policía local de Lérida por agresión a un menor y el agente fue absuelto.

El fallo recoge asimismo que tiempo después de redactar el citado tuit, Hasél se encontró al testigo en un establecimiento hostelero y le dijo bruscamente: «¿Tú eres amigo de los urbanos? ¡Has visto lo que has hecho!».

A continuación, según la resolución, el rapero intentó darle una patada, pero la pudo esquivar. «Te mataré, hijo de puta, ya te cogeré», añadió después de que varias personas se interpusieran.

Pero Hasél arrastra otras condenas. Si la última fuera confirmada, la pena de dos años y medio se sumaría a los nueve meses de cárcel que le impuso la Audiencia Nacional y que ha empezado a cumplir estos días.

Atrincherado en la universidad

Atrincherado en la universidad Además, tiene otras condenas, ya firmes, por apología del terrorismo, y un año de cárcel más por no pagar las multas impuestas en varias sentencias.

La detención por los Mossos d’Esquadra, tras atrincherarse en la Universidad de Lérida, y su posterior envío a prisión para cumplir una condena de nueve meses por enaltecimiento del terrorismo es la causa de una oleada de protestas en Cataluña que se inició en Barcelona y pasó luego a numerosas capitales españolas,

Las protestas, inicialmente dirigidas a favor del rapero y en apoyo de la libertad de expresión, han degenerado con frecuencia en desórdenes públicos con saqueos, destrucción de mobiliario urbano, quema de contenedores y batallas campales contra las fuerzas de seguridad.