Zaragoza suscita el interés de las empresas de patinetes eléctricos compartidos y una buena muestra de ello ha sido el resultado del concurso público que busca adjudicar las dos únicas licencias que este año podrán operar en sus calles. El plazo para presentar ofertas culminaba el pasado jueves y doce empresas pujarán por ellas. Si no son más, ya que las licitaciones pueden presentarse en otras sedes administrativas y llegar la próxima semana al consistorio.

La respuesta del mercado ha sido importante, cuando ya hay cinco firmas operando por sus calles -Koko, Lime, Tier, Voi y Ufo- y el área de Servicios Públicos conocía el interés de «media docena de firmas más» que preguntaron por esta licitación que ahora se resolverá.

No trascendieron los nombres de las marcas licitadoras al concurso pero, en teoría, este mes podría conocerse la adjudicación y, por tanto, dar 15 días a las que ya tienen patinetes eléctricos de alquiler en la vía pública para que retiren de la misma. Los dos que ganen tendrán dos años, con otro de prórroga, para poner en circulación un máximo de 3.400 unidades, 850 cada una al inicio de la concesión de licencia y el doble transcurridos unos meses y si hay demanda. Como novedad, esta adjudicación llevará patinetes a todos los distritos desde primera hora de la mañana, uno de los requisitos indispensables, y destinará un mínimo de 30.000 euros a campañas de sensibilización y de seguridad vial.

Esto es lo que el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) entiende como el canon de una licencia para hacer negocio en el espacio público y que, por enésima vez, le afearon los partidos de la oposición. Esta vez de la mano de una moción del PP en la que, precisamente, se pedía implantar una tasa a las empresas que operen en la capital aragonesa. Tanto de patinetes como de bicicletas, motos o, en el futuro, coches compartidos.

Para el Gobierno, esta condición ya se cumple en el concurso que se resolverá este año. Para el resto, no solo no es tal sino que, en lugar de dedicarlo a esas campañas, debería utilizarse para mejorar el estado de la red de carriles bici o estudiar la creación de nuevos y fijar prioridades, como le instó el PSOE. Sobre todo pensando en esa ordenanza que prohibirá circular por aceras y por calles que no sean pacificadas. Pero lamentaron que tanto en la norma como en la licitación de licencias, ZeC haya actuado sin consultar al resto.