Más de 130.000 aragoneses padecen enfermedad renal crónica, cuyo Día Mundial del Riñón se celebró ayer, y más de 1.600 necesitan diálisis o trasplante. Así se desprende de los datos aportados por la Sociedad Española de Nefrología, que apuntan que Aragón se sitúa ligeramente por debajo de la media nacional en prevalencia e incidencia.
Respecto a los trasplantes, la comunidad es una de las que presenta una mayor tasa, con el 64,7% del total de tipos de trasplante. En concreto, es la tercera del país, solo por detrás de Cantabria y País Vasco. También es una de las autonomías donde las donaciones son más altas.
La mortalidad por enfermedad renal crónica ha crecido casi un 30% en la última década en España. De seguir su ritmo actual de crecimiento se convertirá en la segunda causa de muerte en nuestro país en pocos años, según indicó la sociedad de Nefrología.
