Las familias de los fallecidos en el accidente del Yak-42 organizarán para el próximo viernes en Zaragoza el homenaje principal a las víctimas cuando se cumplen 14 años de la tragedia y "ante la falta de un homenaje oficial por parte del Ministerio de Defensa".

Con motivo de esta efeméride, las familias organizarán además un acto en la provincia turca de Trebisonda, en Maçka, ciudad más cercana a donde ocurrió el accidente, y seguidamente otro en el monte Pilav de Turquía, según han informado hoy fuentes de la asociación de las víctimas.

Asimismo, realizarán sendas ofrendas florales en el Acuartelamiento Castrillo del Val de Burgos, así como en el monumento en memoria de las víctimas en la Glorieta de San Roque; y, también, harán un homenaje a los fallecidos en el Cuartel General del Aire de Madrid, ante el monumento en memoria de los fallecidos en misiones en el exterior, según han informado hoy fuentes de la asociación de víctimas del Yak-42.

Por otro lado, las familias han solicitado la comparecencia en el Congreso del presidente del Gobierno Mariano Rajoy y de la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, una vez conocida la resolución de Defensa que reconoce la responsabilidad patrimonial del estado, emitida el pasado 4 de mayo.

Las familias esperan la reactivación de las solicitudes retiradas el pasado 18 de enero por PSOE, Podemos, Ciudadanos, Compromís y ERC, que prefirieron esperar a la resolución del Ministerio de Defensa, una vez que el Consejo de Estado reconoció el pasado mes de enero la responsabilidad patrimonial del Estado por este accidente.

El PSOE había pedido que Cospedal compareciera en el pleno del Congreso, y no en comisión como lo hizo, mientras que Unidos Podemos-En Comú, ERC y Compromís solicitaron que quien diese explicaciones fuera el propio Mariano Rajoy, ya que presidía el Gobierno que nombró embajador a Federico Trillo y que indultó a los militares condenados por las falsas identificaciones de los cadáveres.

Las víctimas han solicitado a todos los grupos políticos que reactiven estas peticiones de comparecencias "para dignificar la memoria de las víctimas" y para que se den "explicaciones de por qué han tardado 14 años en reconocer que la tragedia pudo ser evitada".

De las 75 personas fallecidas, 53 eran militares españoles que regresaban de Afganistán y 9 que venían de su misión en Kirguizistán a España. Además, había 12 tripulantes ucranianos y un ciudadano bielorruso.

Los fallecidos eran militares con destino Zaragoza, 21; Burgos, 20; Valencia, 13; y Madrid, 8.

De la capital de España, eran 12 de las víctimas; de Castilla y León 8; de Aragón, 7; Comunidad Valenciana, 5; Castilla la Mancha y Galicia, 4; Cantabria, 3; Asturias, Cataluña, Ceuta, Extremadura y La Rioja, 2; Andalucía, Canarias, Murcia, País Vasco y Pamplona, 1; a los que se suman otros tres militares nacionalizados, aunque procedentes de Francia, Guinea Ecuatorial y Sidi Ifni.