La pandemia arrasa con todo. Feria de Zaragoza no ha tenido más remedio que presentar un expediente de regulación de empleo temporal (erte) de fuerza mayor para toda la plantilla, que está integrada por unos 70 trabajadores. La medida, que comenzará a aplicarse a partir del 1 de noviembre, se mantendrá en vigor hasta que el covid-19 permita la celebración de certámenes, algo que a día de hoy es toda una incógnita, según subrayó el presidente de Feria de Teruel a EL PERIÓDICO DE ARAGÓN. "No tenemos una fecha de finalización del erte, ya que estamos a expensas de cómo evolucione el virus", manifestó

La mayor parte de los empleados sufrirán el erte al 100% aunque hay una parte de ellos que no se verán afectados totalmente ya que se mantendrá la actividad comercial y alguna otra hasta que la normalidad regrese al recinto. Tras la primera ola del coronavirus estaba previsto retomar la celebración de eventos el próximo mes de noviembre, con el stock Car (venta de vehículos de ocasión) y el Salón para Eventos, Bodas y Acontecimientos (Nupcial 2020), pero en estos momentos "es imposible" aseguró el presidente de la Feria de Zaragoza. "Desgraciadamente la pandemia sigue descontrolada y la concentración de personas y el grado de internacionalización de algunas hace imposible cualquier celebración", sostuvo Teruel

Pese a todo, la institución, en la que la DGA tiene la mayoría del capital y de la que forman parte también la Cámara de Comercio, el Ayuntamiento de Zaragoza, la Diputación de Zaragoza e Ibercaja, confía en que a partir de abril pueda regresar la actividad al recinto ferial, ya que hay varias citas internacionales que suponen un fuerte espaldarazo económico para la Feria. Se trata de Smagua, Figan (Feria Ganadera) y Smopyc, una de las grandes del calendario y que tuvo que aplazarse este año tras decretarse el estado del alarma.

Feria de Zaragoza se salvará de los números rojos en el 2020 gracias a la celebración de la Feria Internacional de Maquinaria Agrícola (FIMA) y la Feria del Mueble, dos pesos pesados para la actividad ferial que han coincidido este ejercicio. Solo FIMA ha dejado en las arcas de la institución 10 millones en ingresos y un impacto en Zaragoza de 350 millones. A pesar de que el recinto ha permanecido paralizado desde la declaración del estado de alarma, el pasado 14 de marzo, logrará concluir el año con beneficios, lo que da idea del peso que tiene este certamen agrario, que se salvó del cierre por escasos días. Sin embargo, el recrudecimiento del covid-19 en España y en toda Europa hace inviable cualquier tipo de evento.

Hasta ahora la institución ha maniobrado y ha reajustado su situación financiera "al máximo" pero ante la actual coyuntura no ha quedado más remedio, señaló Teruel, que aplicará el erte para toda la plantilla.